Mientras la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) proyecta un nuevo ciclo marcado por la austeridad republicana, los gastos sindicales del Poder Judicial de la Federación (PJF) cuentan una historia distinta: 39.5 millones de pesos han sido entregados al Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación (STPJF) para financiar rifas de automóviles, fiestas, ceremonias y viajes recreativos.
Estos datos, obtenidos de informes del periodo 2019 a 2025 en poder de 24 HORAS, revelan que, incluso durante los mandatos de Arturo Zaldívar y Norma Piña, la SCJN canalizó 18.2 millones de pesos, mientras que el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) destinó otros 21.2 millones.
El nuevo presidente electo de la Corte, Hugo Aguilar Ortiz, asumirá funciones el 1 de septiembre, con una narrativa centrada en la eficiencia presupuestal y la reducción del gasto. Sin embargo, las prestaciones laborales sindicales están protegidas constitucionalmente, lo que impide su eliminación aunque exista voluntad política.
Un conflicto entre discurso y realidad
El contraste entre el discurso de austeridad judicial y los millones en eventos recreativos genera tensiones internas. Estas prestaciones económicas, contempladas en el Contrato Colectivo de Trabajo, han generado cuestionamientos sobre su pertinencia en un contexto nacional donde se exige eficiencia institucional.
El Sindicato del PJF, por su parte, mantiene una postura firme. El pasado 12 de agosto, ningún miembro sindical asistió a la Ceremonia de Reconocimientos por Años de Servicio en protesta por retrasos en el pago del aumento salarial retroactivo, evidenciando una fractura interna entre los trabajadores del CJF y la Suprema Corte.
La fuerza del STPJF en tiempos de reforma
El sindicato judicial, liderado por Jesús Gilberto González Pimentel, ha demostrado su capacidad de presión. En una carta dirigida a Norma Piña, calificó el evento de agosto como una “burla y un atentado a la dignidad” de quienes laboran en los tribunales y juzgados federales.
Pese a que el sindicato entregó 118 medallas al Alto Tribunal días antes del evento, la protesta evidenció que el malestar gremial continúa creciendo, incluso cuando la reforma judicial busca consolidar un modelo austero y transparente.