La Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) vivió un episodio de alta tensión tras la impugnación rechazada de Rodolfo Javier Zepeda Memije, quien buscaba ser candidato a la rectoría. El Consejo Universitario, en sesión extraordinaria, resolvió por unanimidad negar su candidatura y pidió una investigación penal por la supuesta entrega irregular de plazas académicas.
Zepeda denunció irregularidades en el proceso, acusando incluso la intervención de la rectora Lilia Cedillo en la conformación de la Comisión de Auscultación. Sin embargo, la Comisión de Legislación Universitaria, asesorada por la abogada general Míriam Ponce, calificó sus señalamientos como infundados e inoperantes, al sostener que los estatutos permiten la participación de la rectora en la votación.
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El golpe más fuerte contra el coordinador del Eco Campus BUAP llegó cuando se reveló que una de las plazas académicas presentadas no le pertenecía, sino a la investigadora Guadalupe Morales Mejía, quien negó haber cedido su lugar y exigió esclarecer el caso.
Durante la sesión, consejeros universitarios y estudiantes expresaron indignación y reclamaron revisar a fondo todas las plazas entregadas sin concurso de oposición. Entre las voces críticas destacó el director del ICSyH, Giuseppe Lo Brutto, quien calificó de “mancha” este tipo de prácticas que afectan la credibilidad académica.
Finalmente, con 182 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones, el Consejo Universitario no solo rechazó la impugnación de Zepeda, sino que también turnó el caso a la Comisión de Honor y Justicia para determinar responsabilidades en la posible falsificación de documentos.