Google fue condenado en Estados Unidos a pagar más de 425 millones de dólares por violar la privacidad de casi 100 millones de usuarios, confirmó la compañía.
El fallo proviene de un jurado en un tribunal federal de San Francisco, que determinó la responsabilidad de Google por “interceptación ilegal” de la actividad privada de consumidores en aplicaciones móviles.
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La demanda colectiva original fue presentada en julio de 2020, representando a usuarios que habían desactivado la opción de Actividad web y de aplicaciones, pero cuyos datos aún fueron recopilados.
“Esta decisión malinterpreta cómo funcionan nuestros productos, y la apelaremos”, afirmó el portavoz José Castañeda. Añadió que las herramientas de privacidad de Google ofrecen control sobre los datos y respetan la elección del usuario.
Los demandantes señalaron que, aunque desactivaron configuraciones de seguimiento, Google continuó recopilando información de servicios y aplicaciones, lo que constituye una violación a la confianza y privacidad de los usuarios.
El caso destaca la importancia de la protección de datos personales y la responsabilidad de las grandes tecnológicas frente a la legislación estadounidense sobre privacidad.
Google, que se ha enfrentado a múltiples litigios por prácticas similares.