La presidenta Claudia Sheinbaum respondió con firmeza a la propuesta del empresario Ricardo Salinas Pliego, quien pidió una mesa de negociación para revisar los adeudos fiscales de su conglomerado.
“Negociación de la ley, nunca. Como decía Juárez, nada ni nadie por encima de la ley. Se llama estado de derecho para todas y todos”, subrayó Sheinbaum, dejando claro que su Gobierno está abierto al diálogo, pero no a modificar la aplicación de la norma.
La mandataria precisó que el SAT continuará con los procesos legales para el cobro de impuestos pendientes, ya que el tema no es político, sino de cumplimiento legal. “Este no es un asunto de diferencias personales ni políticas; es un tema que lleva años y sexenios”, puntualizó.
Por su parte, Salinas Pliego usó su cuenta de X (@RicardoBSalinas) para insistir en la instalación de una mesa “abierta, seria y transparente” que permita “pagar lo que es justo y corresponde, ni más ni menos”. El magnate incluso ligó su propuesta a la confianza de los inversionistas y a la generación de empleo en México.
El planteamiento surge después de que el empresario amenazara con demandar al Gobierno de Sheinbaum por lo que considera “calumnias” contra su grupo empresarial. En un comunicado, Grupo Salinas sostuvo que “ningún ciudadano o empresa debe ser atacada desde la impunidad del poder público”.
Con ello, la confrontación entre la presidenta y uno de los empresarios más influyentes del país escala un nuevo nivel, colocando en el centro de la discusión la relación entre poder político y grandes corporativos en México.

