La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estrenó su Reglamento de Sesiones, marcando un giro histórico en la vida del máximo tribunal. Entre los cambios más relevantes se encuentra la posibilidad de sesionar fuera de la Ciudad de México, en comunidades indígenas y afromexicanas, además de dar prioridad a las sesiones públicas para garantizar mayor cercanía con la ciudadanía.
De acuerdo con el documento publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), las sesiones privadas no desaparecen, pero quedarán como un recurso excepcional, únicamente autorizadas por el presidente de la Corte, Hugo Aguilar.
“Por regla general, las sesiones deberán ser públicas. Se permitirá la entrada a las personas que deseen asistir, considerando la capacidad de la sala de Pleno”, señala el reglamento. Asimismo, se asegura el acceso a personas con discapacidad, integrantes de pueblos originarios y sectores en situación de vulnerabilidad.
Otro aspecto innovador es la posibilidad de sesiones extraordinarias, incluso durante los periodos de receso habituales, y la opción de que la ciudadanía solicite que la Corte sesione en sus comunidades. En estos casos, los ministros decidirán en sesión privada y, de aprobarse, se activará la organización logística y de seguridad.
Cuando las sesiones se realicen en pueblos indígenas o afromexicanos, la Corte trabajará en coordinación con las autoridades comunitarias, respetando sus normas y formas de organización. Además, en asuntos de alta trascendencia nacional o que involucren a sectores vulnerables, será obligatorio emitir sentencias en formato de lectura fácil, reforzando la transparencia judicial.

