Daniel Noboa, presidente de Ecuador, denunció un intento de envenenamiento tras recibir mermeladas y chocolates contaminados con tres químicos tóxicos, supuestamente entregados durante un acto público. El mandatario afirmó que los compuestos detectados “no son propios de los alimentos ni de sus empaques” y que su presencia en alta concentración solo puede responder a un acto intencional.
En entrevista con CNN, Noboa explicó que su equipo presentó denuncias formales y pruebas ante la Fiscalía, mientras el organismo militar encargado de su seguridad ya abrió una investigación. Este sería el segundo atentado denunciado contra su vida en medio de una ola de protestas indígenas por la eliminación del subsidio al diésel, medida que ha desatado fuertes enfrentamientos.
A comienzos de octubre, el gobierno también aseguró que el vehículo presidencial fue atacado a balazos, sin presentar pruebas. En ambas ocasiones, Noboa se ha mostrado desafiante, al ingresar a zonas tomadas por manifestantes, donde fue recibido con palos y piedras.
Expertos sostienen que las acusaciones buscan fortalecer la imagen política del presidente y debilitar las protestas, justo antes de la consulta popular del 16 de noviembre, con la que Noboa aspira abrir paso a una Asamblea Constituyente.
“Nadie quiere ser envenenado con un chocolate ni atacado con piedras”, expresó el mandatario de 37 años, marcando un nuevo episodio de tensión en el ya convulso escenario político ecuatoriano.

