Aún ilusionado con poder correr en el Autódromo Hermanos Rodríguez, Patricio O’Ward convivió con sus fanáticos en la Ciudad de México, previo a su segunda práctica en Fórmula 1 este viernes. Con una sonrisa confiada y la mirada puesta en su objetivo, el regiomontano reafirmó su deseo de llegar al Gran Circo y representar a México en la máxima categoría del automovilismo.
Ante la ausencia de Sergio “Checo” Pérez, O’Ward será el único mexicano en pista durante las prácticas, lo que lo llena de orgullo y motivación para seguir trabajando por un asiento fijo en F1. “Si Piastri y Norris se pelean entre ellos, Max Verstappen se los va a comer”, advirtió el piloto tricolor, quien competirá con el auto de Lando Norris durante la sesión.
El mexicano no dudó en lanzar una frase que encendió las redes: “Denme el asiento”, cuando se le cuestionó sobre qué haría en caso de una disputa interna dentro de McLaren. Su seguridad y carisma conquistaron a los más de mil aficionados que asistieron a su convivencia en la capital, donde firmó autógrafos, regaló playeras y se tomó fotografías con sus seguidores.
Aunque su futuro inmediato está en la IndyCar, O’Ward no pierde la esperanza de ver materializado su sueño de competir en su país. “Tengo fe de que una victoria en las 500 Millas de Indianápolis y correr en México van a suceder”, aseguró el piloto de Arrow McLaren, quien ya cuenta con dos victorias y un subcampeonato en la serie estadounidense.
Con su carisma, talento y determinación, Pato O’Ward se perfila como el sucesor natural de Checo Pérez, dispuesto a dejar el nombre de México en lo más alto del automovilismo internacional.