Dos feminicidios cometidos por menores de edad, ambos de apenas 13 años, encendieron las alertas en Puebla. Las autoridades estatales reconocen que los casos comparten un patrón: los agresores ingresaron a las viviendas de sus víctimas y, al sentirse descubiertos, decidieron asesinarlas.
El secretario de Seguridad Pública estatal, vicealmirante Francisco Sánchez González, explicó que el caso más reciente ocurrió el pasado viernes por la tarde, en el municipio de Chietla, donde un menor presuntamente ingresó con otros jóvenes a la vivienda de Rosa Isela, con la intención de cometer un asalto.
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Al ser sorprendido, el adolescente apuñaló a la víctima en al menos 15 ocasiones y después huyó del lugar. La Fiscalía General del Estado (FGE) mantiene abierta la investigación para determinar la responsabilidad del menor y de sus posibles cómplices.
“Tenemos el reporte de que es una persona de 13 años, que ingresó a una casa y al verse descubierto, hirió con arma blanca a una mujer. Le causó heridas en el brazo y en el pulmón, lo que le costó la vida”, detalló Sánchez González.
El antecedente: un reto en redes sociales derivó en otro feminicidio
El vicealmirante recordó que en marzo pasado se registró un caso similar en el fraccionamiento Lomas de Angelópolis, donde Alex N., también de 13 años, asesinó a Natalia Andrade, una mujer extranjera, presuntamente como parte de un reto viral en internet.
Ambos casos, señaló el funcionario, reflejan un cambio alarmante en el comportamiento social de los adolescentes, influido por la tecnología, los videojuegos y la exposición a contenidos violentos en redes digitales.
Prevención y educación: la nueva estrategia
El titular de la SSP anunció que el gobierno estatal reforzará las estrategias de prevención del delito en instituciones educativas, con talleres, charlas y campañas dirigidas tanto a estudiantes como a padres de familia.
“Tenemos que llegar a las escuelas, ofrecer talleres, vincularnos con la sociedad y trabajar en la educación familiar. La prevención comienza en casa”, subrayó.
Sánchez González insistió en que el Estado no puede desentenderse del fenómeno social que hoy impacta a los menores, y que urge una política pública integral para evitar que más adolescentes se vean involucrados en delitos de esta magnitud.