Luis Díaz vivió una noche de gloria y tormento en el Parque de los Príncipes. El colombiano firmó un doblete histórico ante el PSG, pero una dura entrada sobre Achraf Hakimi le valió la expulsión directa y dejó al marroquí con una entorsis severa que lo alejará de las canchas por al menos seis semanas.
El Bayern Múnich, que pagó más de 86 millones de dólares por su fichaje, ahora enfrenta su primer contratiempo con el “Guajiro”, quien pese al incidente suma 10 goles y 5 asistencias en una temporada de ensueño junto a Harry Kane.
La prensa francesa lo bautizó como “Doctor Luis y Míster Díaz”, reflejando la dualidad de su actuación: héroe con el balón y villano por la entrada. Mientras Marruecos teme por la baja de su estrella para la Copa Africana de Naciones, el debate crece: ¿fue una acción torpe o una falta imperdonable?
Pese a las críticas, tanto Luis Enrique como Kompany defendieron al jugador: “No fue con mala intención”. Sin embargo, el daño está hecho: Hakimi abandonó el campo entre lágrimas y muletas, y el colombiano enfrenta ataques racistas en redes.
El episodio deja una herida en el campeón europeo y una mancha en la noche que debía consolidar a Díaz como figura. En el fútbol moderno, una jugada puede convertir al héroe en el villano más buscado.