Por instrucción directa de la Presidenta Claudia Sheinbaum, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, encabezó en Michoacán un encuentro con líderes de la Iglesia Católica, Evangélica y comunidad musulmana, con el objetivo de fortalecer el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, una estrategia que busca reconstruir el tejido social a través del diálogo interreligioso.
Acompañada por funcionarios federales como Rocío Bárcena, Arturo Medina, Clara Luz Flores y Mónica Archundia, la titular de la Segob escuchó las propuestas y preocupaciones de los distintos sectores religiosos, quienes coincidieron en la urgencia de promover valores y atender las causas sociales de la violencia.
Durante su intervención, Rodríguez lamentó el fallecimiento del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y reiteró que, siguiendo las indicaciones presidenciales, el Gobierno Federal mantendrá un diálogo permanente con las iglesias, reconociendo su papel esencial en la formación moral y apoyo a comunidades vulnerables.
“Escuchar con respeto a las voces de fe es clave para construir la paz”, afirmó Rodríguez Velázquez, quien destacó la coordinación entre el Gobierno Federal y el Gobierno de Michoacán, encabezado por Alfredo Ramírez Bedolla.
Asimismo, la funcionaria sostuvo un segundo encuentro con representantes de la Iglesia Católica, entre ellos el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Héctor Mario Pérez, donde enfatizó la necesidad de priorizar acciones que mejoren los servicios públicos y la infraestructura, siempre bajo una visión humana y espiritual.
Finalmente, Rodríguez Velázquez subrayó que Michoacán es una prioridad nacional y que la administración federal está comprometida a impulsar políticas públicas que garanticen seguridad, justicia y reconciliación social.