Beyoncé alcanzó oficialmente el estatus de milmillonaria según Forbes, destacándose como una de las figuras más poderosas de la industria musical global.
La cantante de 44 años se une a un reducido grupo compuesto por Jay-Z, Taylor Swift, Bruce Springsteen y Rihanna, quienes también superan los mil millones de dólares.
La publicación señaló que Beyoncé atraviesa una racha financiera destacada, marcada por giras internacionales, proyectos discográficos y el control de su catálogo musical.
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Su gira mundial “Renaissance”, realizada en 2023, recaudó aproximadamente 600 millones de dólares en boletería, consolidándola como una de las más exitosas del pop.
Posteriormente, la texana incursionó en el género country con “Cowboy Carter”, producción que obtuvo el Grammy a Álbum del Año, generando un nuevo impulso comercial.
El proyecto derivó en otra gira, catalogada como la más lucrativa para una solista en 2025, con una recaudación superior a 400 millones de dólares.
Sumados estos ingresos a acuerdos comerciales y ganancias derivadas de la propiedad de sus obras, Forbes estimó 148 millones de dólares obtenidos en 2025, ubicándola como la tercera artista mejor pagada del mundo.
Aunque Beyoncé ha explorado sectores como belleza, bebidas y moda, la revista subrayó que su fortuna proviene principalmente de la música y del control de los derechos de su catálogo.
En 2008, la cantante fundó Parkwood Entertainment, empresa responsable de gestionar su carrera, estrategia creativa, producciones y giras internacionales.
La revista no reveló una estimación total del patrimonio de la artista, pero señaló que su modelo de negocio representa un ejemplo de autonomía financiera en la industria.
El impacto económico de Beyoncé demuestra la relevancia del mercado global de giras, una fuente clave de ingresos para artistas con presencia internacional.