Las Serpientes 

Por: Ricardo Morales Sánchez / @riva_leo

La visita de quien fuera el candidato del PRD a la gubernatura por el Estado de México, Juan Zepeda Hernández, dejó en claro que la operación Los Pinos, por parte del PRI para 2018, está en marcha.

El que fuera candidato palero, del tricolor en la pasada elección celebrada en el vecino estado, de donde es originario el presidente Peña, develó lo que ya habíamos comentado en este mismo espacio.

El tricolor va a poner en marcha para 2018 el mismo modelo con el cual derrotó a Morena y a López Obrador en la elección del pasado mes de julio en el Edomex; la cual, no es otra que dividir el voto opositor para volver la competencia de tercios y retener la presidencia de la República.

Para que la estrategia funcione, una de las prioridades es evitar las coaliciones en su contra, las cuales, como ya también lo hemos mencionado en este espacio, son veneno puro para el tricolor y han mostrado su efectividad en cantidad de elecciones.

Juan Zepeda vino a Puebla a pronunciarse en contra de una posible coalición entre el PAN y el PRD, lo cual dejaría también fuera de la jugada al ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, en su lucha por la candidatura del albiazul a la presidencia de la República.

El ex mandatario en repetidas ocasiones ha dejado en claro que no le interesa ser el candidato del PAN a la Presidencia de la República si no se conforma un frente amplio de fuerzas políticas para poder enfrentar al PRI en 2018.

Zepeda trae instrucciones directas de Los Pinos. Una, para hacer campaña y tratar de posicionarse como el futuro candidato del PRD a la presidencia de la República, aprovechando el éxito que resultó su candidatura en el Estado de México. Y dos, para hablar en contra de una posible coalición entre su partido y Acción Nacional, dinamitar cualquier posibilidad.

Lo que el PRI busca es que Zepeda se convierta otra vez en la revelación electoral, suba sus niveles de conocimiento y popularidad y entonces sea el candidato del PRD a la presidencia de la República en 2018 para robarle 10 puntos a López Obrador y si se puede más, más.

Miguel Ángel Mancera, quien era el plan original, está impedido para poder ser candidato a la presidencia de la República, algo que ya explicó en alguna de sus columnas el periodista, Rodolfo Ruiz.

Otras de las marionetas del PRI, dentro del PRD, son el gobernador de Morelos, Graco Ramírez y el de Michoacán, Silvano Aureoles, ni siquiera pintan y no son garantía de poderle quitar puntos a López Obrador, es decir, no funcionan para el fin que pretende el tricolor.

En el Estado de México la clave del triunfo fue aislar a Morena, aislar al PAN y encontrar un candidato competitivo para dividir el voto de la izquierda en la entidad, lo cual se aderezó con el descarado uso de los recursos federales a favor del candidato del PRI y primo del presidente de la República, Alfredo del Mazo Maza. Juan Zepeda cumplió perfectamente con la encomienda.

Zepeda fue presidente municipal de Nezahualcóyotl y es hijo político del cacique perredista en el Estado de México y también ex alcalde de dicho lugar, Héctor Miguel Bautista, ex senador de la República y actualmente diputado local en el Edomex.

Bautista es la cabeza de la corriente perredista Alternativa Democrática Nacional (ADN), este personaje negoció con Peña Nieto la postulación de su pupilo Juan Zepeda como candidato del PRD a la gubernatura a través del gobernador de Chiapas, Manuel (El Güero) Velasco.

De hecho, tanto a Bautista como a Zepeda ya se les conoce al interior del PRD como “los nuevos Chuchos” por su cercanía al presidente Peña y por los acuerdos que cerraron con su administración.

Así pues, el PRI, a través de Zepeda busca boicotear la posible alianza PAN-PRD, que por otro lado impulsa el diputado federal también del Sol Azteca, Luis Maldonado Venegas, sabedor de que el esquema divide y vencerás le puede dar de nueva cuenta dividendos, tal y como ocurrió en el Estado de México, el cual fue utilizado como laboratorio electoral para enfrentar el proceso electoral 2018. Laoperación Los Pinos está a todo vapor.

Banck, el conciliador

El presidente municipal de Puebla, Luis Banck Serrato, ha comenzado a demostrar un liderazgo a nivel nacional en un tema por demás delicado como lo es el debate que ha surgido por el Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio.

La propuesta de Banck realizada en la Ciudad de México ante integrantes de la ANAC (Asociación Nacional de Alcaldes), de que entre todos los ediles del país, los gobernadores y las fiscalías se discutan las reformas para perfeccionar al nuevo sistema, ha sido bien acogida y demuestra los alcances y la visión del alcalde poblano.

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