¡¡¡ 3, 2, 1, cero… comenzamos!!!
Por Pablo Chávez Meza
Me encuentro en un dilema, a pesar de que mi tía abuela Godofreda me perdonó por haberle dado datos erróneos de posibles prospectos y me dirige la palabra, ahora cómo le explico que sus posibilidades irán disminuyendo.
Ello porque de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay cerca de 13 millones de personas mayores de 60 años, de las cuales 53.9% son mujeres y sólo 46.1% hombres; entonces, mi pobre tía tiene una fuerte competencia.
El 1 de octubre pasado se celebró el Día Internacional de las Personas de Edad, mismo que data de 1990, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas designó esa fecha como un reconocimiento a la contribución que este grupo poblacional ha hecho al desarrollo económico de los países.
Para el caso específico de México, de acuerdo a los datos del INEGI, una gran cantidad de la población nacional llega a la vejez trabajando o buscando empleo, en el caso específico de la Ciudad de México hemos visto que muchas de estas personas laboran como empacadores en tiendas departamentales.
Dentro de este sector, la población económicamente activa (PEA) es predominantemente masculina. Al primer trimestre de este año, 33.9% de personas mayores de 60 años desempeñaban alguna actividad laboral; algo así como 4.4 millones personas, de éstas 50.9% eran hombres, 2.2 millones, contra 19.6% de mujeres, cerca de 864 mil.
Lo más preocupante es que de esos casi 13 millones de viejitos, 66.1% –es decir, 8.5 millones– no es económicamente activo y de ellos, más de la mitad se dedica a los quehaceres domésticos.
Como lo hemos señalado en columnas anteriores, nuestra sociedad empieza a tener un proceso de envejecimiento y si al primer trimestre del año estas son las cifras, ¿qué va a pasar en los siguientes años…?
En materia de pensiones, los datos no son muy alentadores, pues de acuerdo a la Encuesta Nacional de Empleo y Seguridad Social (ENESS), realizada en 2013, una cuarta parte de los adultos mayores –26.1%– estaba pensionado.
Quizá esta cifra si le agradará a La Sabia de mi tía; de ese universo –26.1%– alrededor de 40.9% son por jubilación.
Mientras que 33.9% fue por retiro y vejez, 17.5% por viudez –¡¡¡Oíste, tía!!!– y 3.6% por accidente o enfermedad de trabajo.
Un dato que hay que tener presente nos lo indica la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares 2016 (ENIGH), según la cual en cada uno de éstos reside al menos una persona de 60 años o más que está jubilada, lo cual permite entender lo que significa que haya un ingreso adicional para ese hogar.
Con estas cifras nos podemos dar una idea de la problemática que viene para el futuro; sobre todo cuando vemos a un mayor número de personas mayores de 60 años que trabajan en algún centro comercial como empacadores, ya sea para complementar su pensión, que no es suficiente, o porque es la manera de contribuir con ingresos en su hogar sin sentirse una carga para la familia.
De ahí que los temas como ahorro para la vejez, sea a través de la Afore o por otro medio, cobran importancia; además, como hemos dicho, el número de adultos mayores a los 60 años va en aumento y con ello viene el problema de quienes al no tener dinero tendrán que depender de algún apoyo gubernamental –a través de un programa asistencialista– o de algún familiar.
EL BIVA COMIENZA A TOMAR FORMA
Pues el nuevo mercado accionario que comenzará operaciones para el próximo año, la Bolsa Institucional de Valores (Biva), seleccionó a Thomson Reuters como uno de los proveedores tecnológicos.
De esta manera, el nuevo jugador del mercado accionario nacional contará con las plataformas tecnológicas que permitirán obtener, a la comunidad financiera, respuestas “confiables para tomar buenas decisiones con agilidad y precisión”, dijo Adrian Owen, líder de Segmento de Instituciones Financieras de Thomson Reuters en Iberoamérica.
RECONOCIMIENTO ADICIONAL
La semana pasada agradecimos a muchas personas, mexicanas y extranjeras, que ayudaron en los momentos de desgracia ocurridos por los sismos de septiembre pasado. Por ello, un reconocimiento especial a las Fuerzas Armadas, Ejército y Marina, quienes también estuvieron al pie del cañón.
¡Gracias México, seguimos de pie…!