Alejandro, con merecimientos propios, recibió la designación por parte del partido, sin embargo, de la sierra –se supone– es la cuota que personalmente pidió su marido, José Juan Espinosa, a Ricardo Monreal
Las Serpientes
Por Ricardo Morales Sánchez /@riva_leo
Por fin se develó el misterio en torno a la dupla del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) al Senado de la República, se trata de los ex priistas Alejandro Armenta Mier y Nancy de la Sierra Arámburo.
Alejandro, con merecimientos propios, recibió la designación por parte del partido que encabeza el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, pese a su pasado tricolor, aunque le costará mucho desprenderse del tufo marinista que envuelve su carrera política.
El nacido en Acatzingo es un hombre íntegro, pese a las acusaciones de haber desviado recursos durante su paso al frente de la Sedeso en 2007.
En su hoja de servicios sólo se puede leer la palabra lealtad y su lema siempre ha sido: “La amistad no se presume, se honra”, lo que habla de un personaje de una sola línea, un tanto idealista, pero firme en sus convicciones.
Hombre de trabajo, Armenta es disciplinado y cuadrado, pero siempre dispuesto a entregarse y dar lo mejor de sí. La única mancha en su expediente es haber desarrollado una buena parte de su carrera política dentro del marinismo.
Armenta puede fracturar a una buena parte de la estructura del PRI, a la cual conoce a la perfección, no sólo por haber sido un eficiente operador en el DIF estatal y Sedeso en la administración marinista, sino también por haber sido presidente estatal del partido y coordinador General de la campaña de Blanca Alcalá a la gubernatura en 2016.
El ahora diputado federal por Morena se fue desilusionado de las filas del tricolor, luego de las traiciones de que fueron objeto Javier López Zavala en 2010 y Blanca Alcalá en 2016, además de que ya no coincidía ideológicamente con el PRI de Peña Nieto.
Alejandro es de los hombres que sí le puede sumar a López Obrador y darle estructura al ya de por sí fuerte proyecto del tabasqueño en Puebla, además de que se entiende muy bien con el cuasi candidato a la gubernatura por Morena, el senador, Luis Miguel Barbosa Huerta.
Su designación, aunque les puede doler a los tradicionales de Morena, se puede entender como justa por la forma como Alejandro se la ha jugado con el tabasqueño.
Caso contrario es el de su compañera de fórmula Nancy de la Sierra, quien poco le puede aportar al movimiento del tabasqueño, más que la estructura de su esposo, actual presidente municipal de San Pedro Cholula, José Juan Espinosa.
Su designación no cayó nada bien dentro de los grupos que han acompañado al Peje durante su lucha por llegar a Los Pinos.
Nancy, pese a que reniega hoy de su priismo, fue diputada local gracias a ese partido político y también recibió dos veces la oportunidad de poder alcanzar una curul federal, pero no pudo ganar.
Hasta hace 15 días, Nancy aún era oficialmente priista y asistió al encuentro que el tricolor sostuvo con Enrique Ochoa Reza, Clavillazo, con la militancia de este instituto político en Puebla, luego de eso, renunció al tricolor y en menos de lo que canta un gallo recibió como premio la designación como compañera de fórmula de Armenta, lo cual significa una verdadera bofetada para las bases de Morena.
Sólo por tener un ejemplo, para darle el lugar a Nancy de la Sierra en la fórmula al Senado, Morena hizo a un lado al líder estatal de ese partido en Puebla, Gabriel Biestro, y también excluyó al ex morenovallista Fernando Manzanilla Prieto, quien nuevamente se quedó en la orilla.
Habrá que ver lo que Nancy le puede aportar al movimiento de Andrés Manuel López Obrador en Puebla o si sólo busca montarse en la estructura y la popularidad del tabasqueño para acceder a un puesto de elección popular.
Nancy, se supone, es la cuota de José Juan Espinosa, quien le pidió personalmente a su amigo Ricardo Monreal que intercediera ante Andrés Manuel López Obrador.
MARGARITA SEDUCE
A PUEBLA
La esposa del ex presidente de la República, Felipe Calderón, Margarita Zavala Gómez del Campo, estuvo en Puebla y se robó la atención de la concurrencia, que se volcó a dar su apoyo a la ex primera dama del país.
Luego de una conferencia en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), la cuna del yunquismo poblano, Margarita se fue a comer al restaurante La Noria con un grupo de empresarios poblanos.
Ahí comía el secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano con el senador panista, Javier Lozano Alarcón y el ex secretario de Comunicaciones y Transportes, Carlos Ruiz Sacristán, quien al ver a la ex primera dama se acercó a saludar de una manera muy cordial a la esposa del quien fue su jefe y aún amigo.
Margarita comió con José Manuel Rodoreda Artasánchez, José Luis Piñeira de la Fuente, Carlos Solana Pumarino, José Yitani Maccise y Guillermo Contreras Pisson, catedrático de la UPAEP.
El encuentro fue captado por múltiples ojos que se voltearon a apoyar a la ex primera dama de México, la cual recibió cientos de firmas de adhesión en una sola sentada, Margarita tardó más de media hora para salir de este lugar, asediada por sus seguidores y adeptos.
La esposa del ex presidente de la República les confió a sus comensales que el PAN está condenado a irse al tercer lugar de las preferencias o incluso hasta el cuarto, debido a la cerrazón de su dirigente nacional Ricardo Anaya, quien la bloqueó para poder participar dentro de su ex partido.
REAPARECE LA OPERACIÓN TINACO AZUL
Ayer, un integrante de la comunidad Efekto10 logró captar cómo en la colonia Gonzalo Bautista, localizada al oriente de la ciudad de Puebla, comenzó a trabajar la operación tinaco azul, la cual tanto éxito ha tenido en los últimos procesos electorales.
¿De parte de quién?
Pronto le daremos detalles.