De los 122 casos registrados de presidentes municipales o ex ediles asesinados en el mandato de Enrique Peña Nieto, cinco fueron en el estado
Por: Humberto Pérez Rodríguez
Puebla fue catalogado como una de las ocho zonas de mayor riesgo a nivel nacional para presidentes municipales, según datos de la Asociación Nacional de Alcaldes (Anac).
El organismo integrado por autoridades de extracción panista reveló que, en lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto, 122 ediles han sido asesinados. De ellos, 54 estaban en funciones, nueve habían sido electos y 59 eran ex munícipes.
Durango, Estado de México, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Tamaulipas y Veracruz son los estados considerados como zonas de mayor riesgo en el país.
De los 122 alcaldes asesinados, 55 eran del PRI, 29 del PRD y 16 del PAN, el resto pertenecía a otros partidos políticos.
La Anac comparó cifras del actual mandato federal con de Felipe Calderón Hinojosa, en el cual se reportaron 48 muertes: 15 de ex alcaldes, cuatro de ediles electos y 29 de presidentes municipales en funciones.
“Se puede concluir que los municipios con las siguientes condiciones son los de mayor riesgo para los alcaldes: bajo desarrollo institucional, presencia del crimen organizado y falta de recursos para Seguridad Pública (sin el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad –Fortaseg–)”, aseveró el organismo.
El recuento actual
Apenas la semana pasada, en la comunidad de San Francisco Mixtla, fue ultimado José Efraín García García, alcalde de Tlanepantla.
En marzo de este año, el cadáver de Juan Ojeda González, ex edil de Zihuateutla, fue hallado en terrenos de Buenavista, comunidad perteneciente al municipio de Coyutla, estado de Veracruz.
El 10 de octubre del año pasado, el munícipe de Huitzilan de Serdán, Manuel Hernández Pasión, fue asesinado por un comando armado en una emboscada.
El 24 de enero de 2017 fue encontrado el cadáver del alcalde de Tepexco, Antolín Vital Martínez, quien presentaba tres balazos, al parecer, con proyectiles de 9 milímetros.
En agosto de 2016, el presidente municipal de Huehuetlán El Grande, José Santamaría Zavala, fue asesinado a tiros cuando circulaba en un automóvil particular por el camino que une a la comunidad El Aguacate.
