Las Serpientes
Por: Ricardo Morales Sánchez / @riva_leo
Sumidos en el tercer lugar de las preferencias electorales y anclados por el candidato a la presidencia de la República, el priismo poblano vive el peor de los infiernos, pero dijera el clásico: aún hay más.
La feria de las traiciones por parte de los principales cuadros de este partido ya es evidente y hasta cínica, como la salida de la presidenta del Consejo Taxista de Puebla, Erika Díaz, quien abandonó al PRI para refugiarse en Compromiso Por Puebla en la capital.
La salida de Erika, hija del desaparecido líder de este gremio, Pedro Díaz García, otrora operador priista, obedece a la traición consumada del líder de la CTM, Leobardo Soto, quien le dio instrucciones a su pareja sentimental de irse al partido morenovallista, luego de no obtener posiciones dentro de la planilla del candidato a la alcaldía del tricolor, Guillermo Deloya Cobián.
La traición estaba más que cantada y creo que Deloya actuó en consecuencia a sabiendas de que a pesar de entregarle la regiduría a Erika Díaz, la CTM, o al menos el grupo que controla Leobardo Soto, de todos modos iba a operar a favor del morenovallismo por todo los compromisos que existen con el grupo en el poder.
DOGER VIENE CON ÁNIMOS RENOVADOS
El ex rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y ex alcalde capitalino, Enrique Doger, viene con ánimos renovados.
Pese a que el Partido Revolucionario Institucional se encuentra en el tercer lugar de las preferencias electorales y pese a que las circunstancias no juegan a su favor, Doger algo sabe, pues entrará recargado a la contienda que arranca el próximo 29 de abril.
El académico ve en sus números una elección de tercios, donde ciertamente él parte en el tercer lugar de las preferencias, pero nada lejos del primer y segundo sitios, lo que convierte la carrera por Casa Puebla en tercios.
Sumado a ello, sus enroques nacionales le han pedido dos cosas: trabajar y tener paciencia.
Trabajar para que sus números mejoren, lo cual sin lugar a dudas va a suceder y segundo, ser paciente porque sin duda algo va a venir, luego de que se lleve a cabo el primer debate entre los candidatos a la presidencia de la República.
La marca, el candidato presidencial y hasta el abanderado del PRI a la alcaldía juegan en contra de Doger, pero no se desanima, le apuesta al voto diferenciado, pero sobre todo a su habilidad para debatir y acorralar a sus adversarios.
Hasta el momento, el ex rector y ex alcalde ha aguantado estoicamente las provocaciones del candidato por Morena a la gubernatura, el senador con licencia Luis Miguel Barbosa Huerta, quien gusta de llamar “dogercito” al académico.
En su momento, el académico demostrará de qué está hecho, porque si algo tiene Enrique es que no está acostumbrado a poner la otra mejilla.
En donde también ya están muy cantadas las diferencias es entre el candidato a la gubernatura, Enrique Doger Guerrero y el candidato del Senado de la República, Juan Carlos Lastiri Quirós.
Para muestra un botón: la semana pasada Juan Carlos Lastiri estuvo el martes en Tehuacán y en ningún momento habló de su compañero de partido y candidato a la gubernatura, Enrique Doger, se limitó a pedir el voto a su favor y se acabó.
El viernes Doger asistió a Tehuacán y tampoco se refirió a Lastiri; es más, evitó a los grupos y estructuras identificadas con el ex funcionario federal, lo que dejó en evidencia la ruptura que existe entre ambos personajes.
No obstante, hay quienes afirman que a pesar de todo esto no se puede dar por descontado que Doger y el oriundo de Zacatlán puedan hacer campaña de forma conjunta, de hecho hay voces que afirman que están a punto de llegar a un acuerdo y eso sería más que benéfico para el Revolucionario Institucional.

