Científicos mexicanos logran inocuidad y limpieza de productos animales y vegetales al aplicarles virus que comen bacterias
Por: Redacción
Foto: Archivo EsImagen
Científicos del Laboratorio Nacional para la Investigación en Inocuidad Alimentaria (Laniia) caracterizaron un virus que se alimenta de bacterias que contaminan productos naturales de consumo humano, lo que ayudará a garantizar la limpieza de frutas, verduras, carne y mariscos.
Para facilitar su uso, los virus bacteriófagos (que se alimentan de bacterias) se someten a un proceso de deshidratación; este proceso ha probado su efectividad en productos como pepino, tomate y mango, además de carne de pollo y camarón. Actualmente, se hacen pruebas con leche y otros productos lácteos.
Cristóbal Chaidez Quiroz, director del Laniia, con sede en el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), unidad Culiacán, explicó los resultados de esta investigación a través de un comunicado de la institución.
Potencial en la industria
Los virus que se alimenta de bacterias, bacteriófagos, fueron descritos por primera vez en 1915 y se reportaron con potencial para esa función, pero fue hasta los últimos años cuando hubo un resurgimiento en el estudio de este tipo de virus.
El especialista dijo que ese tipo de virus viven en el medio ambiente, pero no causan daño al ser humano. “Los hemos purificado y después deshidratado para encapsularlos en forma de polvo y facilitar su dispersión en alimentos, en el agua o en superficies de contacto”, detalló.
Destacó que están por patentar este proceso de obtención y encapsulamiento, pues el producto ha comprobado una vida útil en anaquel de dos años y es tres veces más económico que los compuestos químicos en el mercado, los cuales no garantizan la inocuidad de los alimentos.
Otras aplicaciones
En el Laboratorio se pretende, en colaboración con el sector médico, realizar pruebas de fagoterapia para tratar infecciones en la piel; es decir, verter virus encapsulados en forma de polvo a través de parches especialmente diseñados en quemaduras de piel, con el fin de proteger la herida de posibles infecciones.
El Laniia recibió la categoría de Laboratorio Nacional en 2014 por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
En este centro realizan trabajos de control biológico para eliminar bacterias patógenas empleando virus que están en el medio ambiente, lo que la comunidad científica reconoce como el balance de las especies bacterianas.
"Hemos encontrado nichos de mercado en la agricultura orgánica, pero el potencial de nuestros productos va más allá, principalmente en quienes exportan y quieren procesos garantizados de inocuidad, comentó Cristóbal Chaidez.
