El cabildo de Puebla ha estado marcado por los constantes enfrentamientos entre los integrantes de Regeneración Nacional, quienes además de denuncias y amenazas, han atacado a la propia presidenta municipal.

Por: Osvaldo Valencia

Fuera de las simpatías políticas por diferentes liderazgos en su partido, la fractura que viven los regidores de Morena en el Cabildo de Puebla se ha marcado en las últimas semanas.

Denuncias de amenazas laborales, peleas verbales entre compañeros y pugnas por defender a la alcaldesa de la capital son los problemas por los que han atravesado los cabildantes morenistas.

El más reciente desencuentro entre los regidores emanados de la coalición Juntos Haremos Historia lo protagonizaron Iván Camacho Mendoza y Roberto Elí Esponda Islas.

El primero, presidente de la Comisión de Gobernación y Justicia, acusó al presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente de amenazas verbales y físicas el pasado 15 de febrero para que cambiara su postura y apoyara al ex candidato a gobernador de la coalición Morena-PT-PES.

Por dicha acción Camacho Mendoza interpuso una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por lo que le pueda pasar a él o a su familia.

Sin embargo, este lunes Esponda Islas minimizó las acusaciones del presidente de la Comisión de Gobernación al apuntar que forma parte de una estrategia de provocación de la alcaldesa.

“No me merece ningún comentario, no conozco el miedo. Ya hemos visto que son temas de desesperación que lo llevan a estas alturas, pero ya vimos que esa idea es de la propia presidenta”, señaló.

Cabe señalar que esta no es la primera vez que el regidor se enfrasca en declaraciones contra la munícipe de Puebla, pues durante la aprobación del presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2019 el cabildante la cuestionó por “fallarle” a la Cuarta Transformación, a lo que la presidenta municipal le respondió recordándole que ni siquiera está afiliado al Movimiento Regeneración Nacional.

Otros de los regidores que han chocado son Martha Ornelas Guerrero y Carmen María Palma Benítez, presidentas de la Comisión de Turismo, Artes y Cultura, y de Derechos Humanos, respectivamente.

La primera denunció ante la FGE al esposo de Palma Benítez, Óscar Aguirre Beltrán, por insultarla a través de mensajes de texto.

“Sé que los mensajes están ahí, en las redes sociales, me comentó: ‘estúpida, fifí, advenediza’ y otros calificativos que me lastimaron mucho. Ya interpuse una denuncia ante la FGE y vamos a esperar la sanción correspondiente”, expresó.

No obstante, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos sólo se deslindó de los mensajes y señaló que los involucrados deberían encargarse de resolver las acusaciones.