Garganta Profunda
Por: Arturo Luna Silva / @ALunaSilva
La ausencia institucional de décadas permitió que mercados como el Morelos e Hidalgo se convirtieran en guaridas de la delincuencia organizada. Lo mismo son centros de distribución de droga, que lugares de extorsión. Viven un autogobierno. Nunca un policía se para por ahí y los hechos delictivos se derraman. Las colonias aledañas viven en el terror y ahora se atrincheran. El hallazgo de una narcofosa en el Morelos es la expresión máxima de la impunidad que en estos centros se vivía. El problema es ya sistemático.
El mercado Morelos nació como una descentralización de lo que fue La Victoria, en el centro de la ciudad, hace más de tres décadas.
El hallazgo de la narcofosa ahí es de terror.
El parte policiaco lo describe:
“Durante la realización de este último cateo (2 de abril), el personal de la Agencia Estatal de Investigación que participaba en la diligencia percibió olores fétidos que provenían de un predio contiguo usado como estacionamiento vehicular.
“Por esto y previa autorización de la persona facultada para ello, se llevó a cabo un recorrido y se encontró a dos perros comiendo restos humanos, localizando además una retroexcavadora y un camión de volteo, de los cuales también se desprendían olores fétidos”.
Restos humanos que la mafia fue a tirar como si fueran escombro en Chachapa, a pocos minutos de la ciudad de Puebla.
¿En qué momento se pudo llegar a esto?
Los responsables ya están en la mira, pero es impensable lo que ahí ocurre.
Habitantes de la colonia aledaña, México 68, viven presa del miedo y se han organizado para atrincherarse.
Portones eléctricos y bardas en principio, con la dificultad del reglamento: hay ahí un kínder y una secundaria con dos turnos, por lo que el paso debe ser libre.
Los hallazgos en el mercado Morelos se dan además luego de tres jornadas de balaceras.
El mercado Hidalgo también ha sido en el pasado foco de atención por el narcomenudeo.
Lo controla la organización 28 de Octubre.
Ahí mataron a Meztli Sarabia Reyna, hija de Rubén Sarabia Sánchez Simitrio.
Hay detenidos pero no del todo ha quedado claro el crimen.
Ha habido ahí también muchos señalamientos de narcomenudeo.
El autogobierno de los mercados en un asunto grave.
Los problemas se desbordan.
No solamente atañen a esos centros y dificultan la dinámica comercial que debieran tener.
Los años han pasado sin solución.
Es un tema sumamente preocupante.
De urgente atención para los tres niveles de gobierno.
El narco sentó sus reales en Puebla y ya se metió hasta la cocina, incluidos los otrora pacíficos mercados.