El ex senador federal dio a conocer en un posicionamiento que no forma parte de ninguna campaña política, “ni a favor ni en contra de Enrique Cárdenas o Miguel Barbosa”.

Por: Redacción

Para el ex diputado federal Eukid Castañón Herrera, el candidato común de Acción Nacional, PRD y Movimiento Ciudadano (MC), Enrique Cárdenas Sánchez, es un “intruso que entró por la puerta de atrás aprovechando la coyuntura de la tragedia”, en referencia a la muerte de Martha Erika Alonso Hidalgo y Rafael Moreno Valle ocurrida el 24 de diciembre del año pasado.

Recordó que, en los últimos años, el ex rector de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) fue una persona que denostó los gobiernos aliancistas del Partido Acción Nacional (PAN), al encabezar un frente que criticó en varias ocasiones el trabajo de Moreno Valle como gobernador y cuestionar el triunfo de Por Puebla al Frente durante 2018, el cual fue ratificado por las autoridades federales.

Con el argumento de que la postulación del ex director del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY) fue “extraña y sorpresiva”, negó formar parte de alguna campaña política a favor o en contra de Cárdenas Sánchez, así como de Miguel Barbosa Huerta, abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia al gobierno de Puebla.

Además, descartó tener algún tipo de confabulación con el presidente municipal de Atlixco, Guillermo Velázquez Gutiérrez, con quien –dijo– dejó de tener comunicación hace algunos meses, todo ello a través de un posicionamiento.

De igual forma, rechazó tener trato alguno con José Christian N, alias El Grillo, líder del mercado “José María Morelos y Pavón”, ligado a actividades ilícitas, como el narcomenudeo.

“Repruebo completamente que mi nombre sea ocupado entre los dos frentes, en medio de la guerra partidista que existe en la contienda electoral. Como lo manifesté a principios de este año, desde el momento que anuncié mi retiro público, me he mantenido al margen de las acciones políticas que se llevan a cabo en el estado”, declaró.

En su posicionamiento, el ex legislador afirmó ser poblano, con una gran afinidad a la corriente morenovallista que inició su trabajo en 1999 en el estado. “Estoy convencido de las alianzas partidistas y muestro mi respeto a los institutos políticos que forman la coalición, así como a sus militantes y simpatizantes”, concluyó el ex legislador federal.