Por: Guadalupe Juárez

El arzobispo Víctor Sánchez Espinosa lamentó que ni la presencia de la Guardia Nacional en la entidad contenga la violencia y recordó que la injusticia que se vive a diario provoca que los pueblos “marginados y olvidados” violenten y tomen justicia por mano propia, por lo que urgió a atender los casos de inseguridad en el estado.

“Tenemos (que) entrarle (para evitar linchamientos), somos uno más de la comunidad que hacemos lo nuestro, pero también las autoridades deben hacer su trabajo. Nuestras comunidades están lastimadas, por eso la presión tan violenta con la que actúan”, opinó en conferencia de prensa.

En este sentido, también se pronunció respecto a los crímenes contra mujeres en el estado, al pedirles a las autoridades que se redoblen esfuerzos en seguridad pública, así como fortalecer el sistema de procuración de justicia para que no queden impunes los feminicidios y los casos de mujeres violadas.

“La vida es sagrada y si las mujeres protestan porque han sido violadas, han sido asesinadas, hay que decirles a los que las violentan que la vida es sagrada desde su concepción hasta su muerte natural y nadie tiene derecho a quitárselas”, agregó.

Sánchez Espinosa respaldó las manifestaciones que han hecho las mujeres en los últimos días para exigir que nadie atente contra su dignidad, integridad y su vida, aunque no compartió que estas terminen en actos violentos.

SIN CONCLUIR, LA RESTAURACIÓN DE TEMPLOS TRAS 19S

En otro tema, lamentó que la reconstrucción de templos afectados por el sismo del 19 de septiembre de 2017 –que tendrían que ser restaurados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INA)– sea lenta y advirtió que hay pobladores que junto a los párrocos han intentado intervenir los inmuebles para continuar con sus actividades religiosas de forma normal.

El líder de la grey católica calculó que hay 600 templos con afectaciones, aunque el año pasado estimaron sólo 400.