En un inicio, cada diputado dispondría de 100 mil pesos, pero, por un acuerdo, se decidió que incrementara la cifra a 170 mil por legislador.

Por: Mario Galeana

El uso de casi siete millones de pesos que los 41 diputados locales dispondrán para rendir su primer informe de labores ha provocado un rifirrafe entre los legisladores de Juntos Haremos Historia y el PAN.

El coordinador de la bancada morenista, Gabriel Biestro Medinilla, anunció que él y cinco diputados más de las bancadas de Morena y PES han renunciado a la bolsa de 170 mil pesos con la que cada legislador contará para explicar sus actividades en el primer año de la LX Legislatura.

Los cinco restantes son Bárbara Morán Añorve, Olga Lucía Romero Garci-Crespo, Guadalupe Tlaque Cuazitl, Fernando Sánchez Sasia, de Morena, y Nora Merino Escamilla, del PES.

En contraste, el legislador Oswaldo Jiménez López, del PAN, anunció que los integrantes de su bancada no renunciarán a los recursos. Incluso, dijo que aquellos que lo hagan será porque posiblemente no tienen nada que informar.

“A partir de que sabíamos que teníamos esa bolsa, empezamos a hacer un ejercicio del informe. Empezamos a asumir algunos compromisos. Yo ya no estoy en condiciones de hacer esa devolución, que aparte me parece que está más inscrito en el tema del populismo y la demagogia… o a lo mejor ellos no tienen nada que informar”, dijo.

En una Legislatura controlada por Juntos Haremos Historia, el fondo para la rendición de informes pone en entredicho la llamada “austeridad republicana” que ha venido propagando Morena y sus aliados.

En un inicio, la bolsa de recursos sería de 4.1 millones de pesos para que cada diputado dispusiera de 100 mil pesos. Pero, por un acuerdo, decidió incrementarse la bolsa de recursos para esta actividad.

Biestro Medinilla, quien preside la Junta de Gobierno y Coordinación Política, aseguró que él se opuso a esta distribución de recursos, pero evitó señalar a los partidos que sugirieron el reparto entre legisladores.

“Salió por un acuerdo de la Junta de Gobierno al que yo siempre me opuse, pero la mayoría habló. Yo dije que la bancada de Morena renunciaría, pero la decisión es al libre albedrío. Cada diputado y diputada es libre de usarlo o no. (Pero) es una cuestión de congruencia. Nosotros ya tenemos apoyos legislativos para esas cosas”, reconoció.

Los casi siete millones −detalló− estaban etiquetados para la Dirección de Comunicación Social. Pero, tras la demanda de los diputados, se hicieron modificaciones ante la Contraloría y la Secretaría General del Poder Legislativo para que cada legislador utilizara estos recursos según sus intereses.

Entre los lineamientos que se establecieron para el empleo de los recursos se especifica que sólo podrán ser utilizados en cadenas de televisión y radio.