El ex técnico del club camotero reveló en una entrevista para Reforma que la televisora toma las decisiones al interior de La Franja y no el empresario poblano.

Por: Staff 24 Horas Puebla

El ex técnico del Puebla José Luis Sánchez Solá reveló que la empresa TV Azteca es la propietaria del equipo y no Manuel Jiménez, quien −reconoció− no toma ni una decisión.

En entrevista para el diario Reforma, recordó que la televisora del Ajusco se acercó a la familia López Chargoy, que todavía figuraba como dueña y directiva, para invertir en el club y “salvarlo” con la anuencia del entonces presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Decio de María Serrano.

“La gente no sabe quién es el dueño del Puebla. El papel dice que es (Manuel) Jiménez; Jiménez no decide nada, es TV Azteca (…) Que, si también ellos no hubieran metido dinero, el Puebla no existiría.

“Ellos entran en un draft que a los Chargoy no les dejan comprar jugadores porque tenían deudas. Se acerca TV Azteca y dice: ‘¿Cuánto debes?’, ‘Pues tanto’. ‘A ver, mira, te doy tanto y entro y hablamos con Decio de María y arreglamos todo’. El Puebla no iba a competir. Al cuarto para las 12 entran ellos rescatan al Puebla, pero tan fácil que era decirlo. Dicen que Jiménez es el dueño, Jiménez no es dueño, no toma ni una decisión”, confesó para Grupo Reforma.

El ahora colaborador de 24 Horas Puebla dejó entrever que la empresa de la familia Salinas Pliego −dueña de los derechos de transmisión− habría tenido injerencia en el cambio de horario del plantel para disputar los viernes por la noche sus encuentros como local en el Cuauhtémoc.

“(La televisora) hace un programa que se llama Viernes Botanero y se acabó. Esa es la verdadera tragedia, porque hacen un programa que se llama Viernes Botanero con una tradición de 75 años”, señaló el también ex timonel de representativos como Estudiantes Tecos, Correcaminos UAT, Chivas USA, Veracruz y Venados de Mérida.

En la entrevista con Reforma, Chelís anunció su retiro del futbol profesional después de una carrera de 13 años como estratega en la Primera División (hoy Liga MX) y Primera A (Ascenso MX), así como en la Major League Soccer.

Tras haber vivido su cuarta etapa como entrenador del Puebla y ser destituido después de la jornada 4 del Torneo Apertura 2019, dijo sentirse dolido y decepcionado por la forma en la cual dejó la plantilla, donde algunos jugadores, auxiliares y directivos no respaldaron su proyecto futbolístico.

“Empezaron muy mal la pretemporada, se salían a la mitad; menos trabajo, nada más querían una sesión. (…) Los (auxiliares) del semestre pasado, El Ruso (Damián Zamogilny) y Rafa (Fernández) no eran tan brillantes como estos (Octavio Becerril y Joaquín Velázquez), pero por lo menos me seguían, trataban de seguirme. El Rambo (Ángel Sosa, director deportivo) no hizo pretemporada conmigo y llegando me dice: ‘Sé lo que te estoy dando’.

“Se supone que el equipo era mejor porque tenías a Christian Tabó y a Christian Marrugo más los del semestre pasado; imaginé que, junto con estos, sabiendo lo que me habían dado, iban a aguantar más los madrazos”, soltó Chelís.

Afirmó que no le tendieron la cama para sacarlo del equipo, por el contrario, ciertos elementos determinaron los horarios para entrenar (en la mañana o por la tarde), así como las cargas de trabajo.

Agregó que ocho de 25 jugadores que conforman la plantilla se despidieron de él, una vez que dejó el banquillo. Estos fueron Daniel Arreola, Daniel Lajud, Diego Abella, Jorge Zárate, Luis Noriega, Néstor Vidrio, Nicolás Vikonis y Rodolfo Salinas.

“Estoy muy decepcionado de la raza humana, en los tres últimos equipos me he topado con gente que no es buena”, aseguró Sánchez Solá.