Se tiene la idea de que un conductor experimentado tiene menos probabilidades de verse involucrado en un hecho de tránsito, en comparación directa con uno inexperto o en proceso de adaptación; sin embargo, la experiencia y el aprendizaje se enfrentan a un mismo factor de riesgo: “la confianza”, ya sea por falta de o por exceso de la misma.
¿CÓMO AFECTA LA “CONFIANZA” EN LOS CONDUCTORES?
En los nuevos conductores “la falta de confianza”, producto de su inexperiencia y proceso de aprendizaje, se ve reflejada en:
- Una menor atención en la vía
- Menor seguridad y tiempo de respuesta para realizar maniobras
- Más atentos a la ubicación general que a la vía específica, conducir en calles o zonas desconocidas
En los conductores experimentados “el exceso de confianza”, producto de la práctica de los años y aspectos rutinarios de su desplazamiento, se ve reflejada en:
- Baja percepción del riesgo, el ejemplo más común: sujetar el volante con una mano
- Relajar la postura ergonómica, disminuye el cono visual y la visión en los retrovisores
- Realizar faltas al reglamento de forma deliberada, que se repiten a diario hasta convencernos que no existe peligro
FACTORES ADICIONALES QUE AFECTAN LA CONFIANZA AL CONDUCIR
- Pasajeros ruidosos en el automóvil, niños inquietos o discutir con la pareja
- Fallas mecánicas evidentes, en especial el desempeño de motor o frenos, traducido en ruidos extraños
- Conducir utilizando el celular, en este caso, confianza traducida en: seguridad
NOTA: ¿LA TECNOLOGÍA EN AUTOMÓVIL PROMUEVE MALOS HÁBITOS AL VOLANTE?
La tecnología incorporada al automóvil, como “seguridad vial pasiva” es una excelente herramienta de prevención, sin embargo, paradójicamente, los conductores más jóvenes han dejado de lado las técnicas indispensables de conducción, depositando toda su confianza en estos dispositivos periféricos y, cuando estos fallan, se pueden
producir hechos de tránsito; el ejemplo más claro es dejar de “espejear” de reversa y sustituirlo por la imagen de la cámara en el tablero.
REFLEXIÓN DE LA AMTM EN CONCRETO
El “factor humano” será responsable de 80% de todos los hechos de tránsito, en este caso el “exceso de confianza” estará contemplado en la mitad de ellos, NUNCA debemos olvidar que el riesgo será una realidad siempre que estemos frente al volante, evitar caer en el exceso o falta de confianza disminuye la posibilidad.