Las Serpientes
Por: Ricardo Morales / @riva_leo

Desde hace muchos años se decía que cuando a Volkswagen le daba gripe a Puebla le daba pulmonía y es que una buena parte de la economía de la ciudad gira en torno a esta planta automotriz por su generación de empleo y derrama económica.

El impacto se duplica si se toma en cuenta que durante la administración morenovallista se apostó otra vez hacia la industria automotriz y también a otra empresa alemana, Audi, quien se asentó en la zona de San José Chiapa

Lamentablemente, durante el primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, la industria automotriz, una de las más importantes impulsoras de la economía, registró su mayor caída desde la crisis de 2009, puesto que se redujo 7.7% con respecto a 2018.

El golpe para la economía poblana por la caída en las ventas del mercado automotriz, para Volkswagen y Audi, ha sido butal, pues se trata de dos de las empresas más afectadas, sobre el cual gira una muy buena parte de la economía de la entidad.

La caída en las ventas de automóviles en el país y en Puebla forma parte del nulo crecimiento económico que se registró el año pasado, junto con la fuerte contracción en la industria de la construcción (otro de los pilares económicos) y la severa restricción del gasto público, por causa de la llamada “austeridad republicana”, que además de reducir drásticamente las compras del gobierno, también llevó al despido de miles de empleados del sector público. La entidad va a resentir muy fuerte esta situación.

Según especialistas del sector, esta caída estuvo motivada por el estancamiento de la economía, la contracción en la generación de empleos y el aumento en la inseguridad. Cabe señalar que 2019 es el año más violento en la historia del país.

De acuerdo con cifras reveladas el martes pasado por el INEGI, en 2019 se adquirieron millón 317 mil 727 vehículos nuevos, 7.7% menos que 2018, siendo el tercer año consecutivo en que disminuye la comercialización de autos nuevos. Es también el volumen más bajo desplazado por la industria en cinco años.

Pero las cosas no se quedan así, aún pueden empeorar. La expectativa para 2020 no es muy optimista, según el director de AMDA, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, Guillermo Rosales, citado por el diario El Financiero.

“La expectativa para 2020 se sigue ubicando en terreno negativo, estimándose que pueda ocurrir una caída cercana a 2% durante 2020 en el número de vehículos nuevos comercializados en México”, dijo.

Según los datos oficiales, las marcas más afectadas en ventas durante el año anterior fueron Ford, que cayó 16.3%; Chrysler, con 14.2%; Nissan, 14.1%; Honda, 12.9% y General Motors 10.2%

Y, aunque en general el sector retrocedió, hubo marcas que crecieron, como Renault, Suzuki, Mazda y Peugeot, las únicas que pueden cantar victoria; sin embargo, el panorama para Puebla, por supuesto que no es nada alentador.

Lo cierto es que en materia económica, la entidad pende de un hilo con el sector automotriz a la baja, con el de la construcción contraído y con el turismo, sin ruta y sin rumbo, nada bueno se ve para 2020.

SENSIBILIDAD SOCIAL

El gobernador del estado, Miguel Barbosa, mostró sin lugar a dudas que si algo lo mueve, es el corazón.

El mandatario estatal de inmediato tomó cartas en el asunto de los infantes del Hospital para el Niño Poblano y que se quedaron sin sus respectivos medicamentos para su tratamiento.

Sin poses de ningún tipo, el gobernador se apostó a las afueras del nosocomio y de inmediato se entrevistó con los padres de los niños afectados y se comprometió a darles el medicamento hasta que la Federación regularice el suministro. Sin duda esto habla del tamaño de ser humano del mandatario estatal.

Los medicamentos se les darán a los niños y eso es lo más importante, un punto a favor de la administración estatal.