Nada aporta el enfrentamiento de las autoridades con los medios de comunicación para la prevención del coronavirus. Por el contrario, la coordinación de todos los sectores es el escudo propicio para evitar una catástrofe.
El mal ya llegó a Puebla y lo siguiente es adoptar la defensa correcta. Las medidas de prevención nunca están por demás. Y en eso se debe trabajar.
Las instituciones educativas, como el Tecnológico de Monterrey campus Puebla y la Udlap, pusieron el ejemplo hace días. Las restantes deben asumir la misma medida.
A estas alturas es intrascendente si las autoridades minimizaron la situación. Menos confrontar a quienes cuestionan –reporteros– sobre la preocupante situación de salud.
Lo importante es prevenir y no lamentar. Nadie debe molestarse y menos darse por aludido como responsable en Puebla. Se trata de un mal que puede evitarse.
Las autoridades son las responsables de asumirlas. Esa es su labor.
En nada abonan a la causa actitudes de soberbia e imposición. Por el contrario, siempre es mejor mostrar cordura.
En los edificios del Consejo de la Judicatura Federal, Tribunales Colegiados, Tribunales Unitarios y Juzgados de Distrito, a partir de este día, como medida preventiva, habrá un filtro de toma de temperatura a todo el personal a la entrada a sus labores –8:00 horas–.
El personal, litigantes, abogados y usuarios deben llegar 10 minutos antes de su horario normal. No podrán entrar a cualquier edificio sede del CJF si presentan temperatura alta –38 grados o más–.
En caso de detectar un incremento en la temperatura se solicitará de inmediato la intervención de las autoridades de salud.
El regreso a las actividades cotidianas aumentará el riesgo de contraer el virus si no se asumen las medidas adecuadas.
Reporte del Informante
Ministerios públicos reos. El edificio de la 12 Oriente, donde laboran los ministerios públicos y personal médico, sirve como reclusorio. Ulises Gómez, quien se promueve para fiscal metropolitano practica violencia de género en las instalaciones.
En complicidad con Isabel Torres, Leonarda Cortés y Adriana Iguanzo, prohibieron idas al baño al personal, tampoco salir a ingerir alimentos durante las 24 horas ininterrumpidas de servicio.
Para entrar al sanitario deben solicitarlo con anticipación y no pueden tardar ni usarlo con frecuencia.
El trato al personal es deshumanizado, sobre todo irresponsable. Las medidas de higiene para prevenir el contagio de coronavirus no pueden asumirse porque no hay jabón en el baño.
Adriana blofea que conoce al fiscal Higuera Bernal, quien –según ella– ya le aseguró su permanencia en el puesto. Cada semana realiza juntas para dar nuevas órdenes de restricción y prohíbe la entrada con celulares.