El encono, la confrontación, la disputa abierta y directa, sin cuartel ni miramiento alguno, persiste incesante del gobernador hacia el rector de la BUAP.
No cede.
Ni amaina.
Mucho menos se prevé un alto para dar paso al diálogo.
¿Qué se quebró en la relación Barbosa-Esparza?
¿Qué llevó a dinamitar el puente universidad-gobierno?
¿Qué le hizo Alfonso a Luis Miguel?
¿Acaso la ruptura es por la elección gubernamental de 2018, cuando perdió Barbosa ante Martha Erika Alonso?
¿O es por los comicios extraordinarios de 2019, donde triunfó Barbosa, pese a perder el voto en la ciudad y municipios conurbados?
¿Qué hay atrás de esta brutal campaña contra el administrador central de la máxima casa de estudios de Puebla?
¿Por qué la obsesión de apoderarse de la BUAP?
Estas y cientos de interrogantes más están en el colectivo poblano, pese a la cuarentena por Covid-19, se preguntan y cuestionan en las redes.
Porque, en la percepción ciudadana, se instaló la imagen de un mandatario que pelea y confronta con todos los sectores: sea político, empresarial, dirigentes de partidos o medios de comunicación.
Incluso, en contra del gobierno federal, a cuyo partido, Morena, pertenece el Ejecutivo estatal.
No ven los poblanos a un gobernante de consensos, sino de disensos.
No aprecian a un mandatario de diálogo, sino de choque.
No visualizan a un titular del Ejecutivo de sumas, sino de animadversiones y resentimientos.
Aunado que apenas lleva nueve meses al frente de un estado con seis millones de habitantes, restándole más de cuatro años de mandato.
NO ES LA HORA DE OBSESIONES NI BATALLAS PERSONALES: ESPARZA
Durante la sesión virtual del Consejo Universitario, Alfonso Esparza Ortiz lanzó el dardo al “acusar persecución política por parte del gobierno del estado contra su hija y contra él”.
Y descalificó que se prioricen las obsesiones del gobernador por encima de las necesidades que exige la ciudadanía ante la pandemia –con más de 430 decesos y dos mil 500 personas con coronavirus–.
El rector fue por más.
“El gobierno de Puebla ha decidido que es más importante acrecentar batallas.
“Que es más importante arremeter contra los que considera sus enemigos… y ahora, me incluyo entre ellos, porque hay declaraciones y pruebas de que está atentando en el caso concreto de mi hija, en lugar de pensar en lo que es más importante en este momento.
“Y en este momento lo que es más importante son los ciudadanos de Puebla”.
Machacó Esparza:
“No es momento de obsesiones.
“No es momento de enemigos personales.
“No es momento de acrecentar batallas.
“Es momento de atender la urgencia y la emergencia.
Respecto al tema de la Auditoría Superior del Estado (ASE), apuntó sobre las declaraciones que ha dado el Congreso y el auditor Superior–Francisco Romero Serrano–, de que los auditores externos sean contratados por ellos y a su vez implementen un organismo de control interno en la BUAP.
Ello, dijo Alfonso Esparza, es “algo total y absolutamente ilegal, además de que atenta contra la autonomía universitaria”.
Vale acotar:
Este espacio no está abocado –ni estará– a criticar por criticar, ni denostar por denostar, el caminar político-gubernamental de Luis Miguel Barbosa.
No es función de los medios de comunicación, periodistas y columnistas.
Más sí es obligación plasmar de manera objetiva y veraz el comportamiento y actuar del gobernante.
Ahí están los apuntes de directores de medios nacionales y columnistas.
Ayer el periodista Alejandro Cacho en su columna Touché, que se publica en El Heraldo de México, quien escribió: “Barbosa, el déspota”.
“Déspota es aquella persona que trata con dureza a sus subordinados y abusa de su poder o autoridad, según la Real Academia Española de la Lengua.
“Todo eso es Luis Miguel Gerónimo Barbosa Huerta, gobernador de Puebla. Y sus hechos y dichos lo confirman.
“El 10 de octubre de 2019 se refirió a la muerte de la ex gobernadora Martha Erika Alonso y su esposo, el ex gobernador Rafael Moreno Valle: Y así fue como ganamos. Todos los que ganamos el 1 de julio del 2018, porque yo gané, me la robaron. Pero los castigó Dios.
“El 25 de marzo, 2020. Había 38 casos de coronavirus y, cual buey en el burladero, arremetió: La mayoría son gente acomodada, ¿sí lo saben o no? Si ustedes son ricos tienen el riesgo, si ustedes son pobres, no. Los pobres estamos inmunes.
“El 31 de marzo, 2020. Se burló: Yo les propondría que quien tuvo coronavirus continúe con los cuidados, su caldo de pollo con su cebollita, su chile bien picoso y ajo.
“Barbosa ya era déspota antes de ser gobernador. Se ostentaba como licenciado en Derecho, pero sin título. Tramitó la cédula profesional fast track ya siendo gobernador. Abrió su despacho y litigó como abogado. Eso es un delito en Puebla.
“Ahora, Barbosa abrió un conflicto innecesario con las tres mil 800 escuelas privadas del estado. En medio de la pandemia urgió a sus diputados para aprobar la Ley de Educación estatal que significa una expropiación de facto de sus bienes.
“Así o más claro quién y cómo es Barbosa”.
¿Así es…?
Al tiempo.