La carrera hacia la vacuna contra el coronavirus continúa, y ninguno de los participantes mengua en sus esfuerzos: La Universidad de Oxford y el laboratorio inglés AstraZeneca anunciaron el sábado que se reanudaron los ensayos clínicos de su proyecto, luego que el martes anunciaran que, por una reacción adversa (un caso de mielitis transversa), los mismos serían suspendidos indefinidamente.
“El comité del Reino Unido ha concluido sus investigaciones y ha recomendado a la MHRA que es seguro reanudar los ensayos en el Reino Unido”, difundieron, aunque queda pendiente explicar a qué obedeció la enfermedad.
Esta vacuna es uno de los proyectos occidentales más avanzados, probado con decenas de miles de voluntarios en el Reino Unido, Brasil, Sudáfrica y, desde el 31 de agosto, en Estados Unidos. Está en Fase III, cuando se verifica seguridad y eficacia.
En tanto, el laboratorio Pfizer informó que ampliará el universo de voluntarios para su vacuna -que ya se encuentra en pruebas de la Fase III-, al pasar de 30 mil a 44 mil.
La expansión permitiría a las empresas inscribir a personas de hasta 16 años y con VIH crónico estable, hepatitis C y hepatitis B.
Este diario publicó el viernes que si el estudio tiene éxito, las empresas podrían presentar la vacuna para su aprobación regulatoria a partir de octubre, lo que las pondrá en camino de suministrar hasta 100 millones de dosis para fines de 2020 y mil 300 millones para fines de 2021. Esta candidata a vacuna contra el SARS-Cov-2 utiliza ARN mensajero químico para imitar la superficie del coronavirus y enseñar al sistema inmunológico a reconocerlo y neutralizarlo.
leg