Para contener el ingreso de la caravana migrante procedente de Honduras, que busca llegar a la frontera sur de México con destino a Estados Unidos, alrededor de mil elementos de diversas dependencias forman cordones de vigilancia.
Personal del Instituto Nacional de Migración (INM), Guardia Nacional (GN) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se ubica en puntos de control migratorio en la frontera sur de México; Río Suchiate y El Ceibo, municipio de Tenosique en Tabasco.
De acuerdo a fuentes consultadas, la caravana de aproximadamente tres mil personas se dividió en grupos. En un principio estaban conformados por cerca de cinco mil extranjeros; el sábado pasado en Guatemala dos mil fueron retornados de forma voluntaria a su país de origen.
Durante un recorrido en Ciudad Hidalgo, Chiapas, el comisionado del INM, Francisco Garduño, comentó que hay drones vigilando los nuevos caminos que los polleros transitan.
Acompañado del embajador de Guatemala en México, Mario Adolfo Búcaro, resaltó que cuentan con tres albergues para brindarles atenciones de alimentación, salud e higiene.
“Estamos listos como siempre lo hemos hecho preventivamente en el operativo…con políticas de respeto de los derechos humanos, políticas humanitarias y nada más aplicando la ley dando una migración ordenada, segura y regular a fin de garantizar también la integridad”.
También destacó que cuentan con el programa Sembrando Vida, “nada más para su información tenemos 12 mil tarjetas para gente que necesita trabajar en la frontera, son 12 mil si hubiese realmente la demanda tuviéramos 50 o 100 mil”.
Por otra parte, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) reportó que el número de solicitantes de refugio en septiembre fue de tres mil 395, que comparado con agosto donde registró dos mil 29, refleja un aumento de 67.3%.
Debido a la pandemia por Covid-19, de enero a septiembre pasado alcanzó 27 mil 666 lo que, comparado con el mismo periodo de 2019, cuando sumó 54 mil 822, representa una disminución de 49.5% solicitantes de refugio.
El director de la Casa del Migrante de Saltillo, Alberto Xicoténcatl, dijo que diversos organismos como la Oficina de Naciones Unidas, Derechos Humanos, ya habían asumido que una vez que descendiera la prevalencia de la pandemia en Centroamérica era muy probable que el flujo de migrantes se reactivara.
LEG