Después de las emociones vividas en la burbuja de Arlington, Texas es imposible no tocar el tema en este espacio, ya que la conclusión de la serie mundial en las grandes ligas entre Rays y Dodgers entregó el segundo título del año a la ciudad de Los Ángeles después de que los Lakers se coronaran campeones hace 16 días en la NBA, lo cual de acuerdo con el departamento de estadísticas de ESPN, es el período más corto de tiempo en el que una ciudad ha podido festejar campeonatos de las ligas en el vecino del norte, superando los 63 días entre los campeonatos de los Yankees y de los Gigantes de Nueva York en 1938 https://www.youtube.com/watch?v=L5byCxvRFXQ.

Ambos equipos culminaron una sequía para la ciudad californiana, en el caso de la quinteta liderada por LeBron James fueron 10 años en que se les negó el título en el deporte ráfaga, y para el caso específico de los Dodgers tuvo que transcurrir un largo período de 32 años, en ese entonces venciendo a los Atléticos de Oakland de José Canseco y Dennis Eckersley en 1988 https://www.youtube.com/watch?v=8-x3x-Pe4dY.

La fiesta en los Ángeles no espero a pesar de la recomendación de las autoridades de que estas no se llevarán a cabo ante una posible victoria del equipo, los festejos iniciaron tras la conquista del séptimo título en la historia de la franquicia en el estacionamiento del Dodger Stadium que aun cuando por la mañana fue habilitado para realizar pruebas COVID, por la noche transmitió los juegos del equipo en una pantalla gigante.

La victoria sobre los Rays de Tampa Bay la noche de este martes se volvió muy significativa para los amantes del rey de los deportes en nuestro país por la importante participación de los dos serpentineros mexicanos, Víctor González y Julio Urías, quienes fueron claves en la conquista del trofeo.

En el caso de Víctor González oriundo de Tuxpan, Nayarit, llegó como relevista para los Dodgers y debutó a finales de julio pasado ante los DBacks  de Arizona, su participación en el sexto juego fue clave desde la elección del manager Dave Roberts quien solicitó su ingreso con el objetivo de detener la ofensiva de los Rays, Víctor cumplió de forma perfecta al ingresar al cierre de la quinta entrada para dar cuenta de Austin Meadows, en la sexta recetó tres chocolates consecutivos a Brandon Lowe, Manuel Margot y Joey Wendle para sacar limpia la entrada con 17 lanzamientos. En total lanzó una entrada y un tercio sin aceptar hit, sin otorgar base por bolas y con tres ponches para acreditarse la victoria ante la reacción ofensiva de los Dodgers frente al relevista Nick Anderson.

En el caso de Julio Urías, oriundo de Culiacán, Sinaloa, ingresó con la confianza del manager,  Dave Roberts, para liquidar el partido más importante de los últimos tiempos para su equipo y lo hizo sin permitir corredores desde el cierre de la séptima entrada, su actuación lo convirtió en el salvador del título orquestado por sus compañeros de novena, su destacado salvamento lo convirtió en el primer pitcher desde Madison Bumgarner en 2014 y el cuarto en total en concretar un cierre de 7 o más outs en un juego para definir el título del clásico de otoño, además de ser el primer jugador mexicano en sumar 5 apariciones en una Serie Mundial.

Ambos jugadores sin lugar a dudas trajeron a la memoria la destacada labor de Fernando Valenzuela en los años 80 y reforzaron la idea de su promisorio futuro en la gran carpa, cabe destacar que ambos jugadores emanaron de centros de formación mexicanos e incluso se enfrentaron representando a sus respectivas selecciones estatales en Olimpiada Nacional, ambos tienen 24 años y otro dato que comparten es una importante lesión que los alejó del diamante en 2017, en el caso de González se vio obligado a regresar a México donde jugó para Charros de Jalisco, Urías por su parte perdió actividad a lo largo de un año con la inquietud de pronósticos que anunciaban el fin de su carrera en los montículos.

Sus historias adquieren relevancia para los amantes de este deporte en México que estaban sedientos de ver a un mexicano triunfando en el máximo escenario deportivo, sin lugar a dudas el triunfo logrado la noche de este martes en Arlington, impulsará los sueños y esfuerzos de una generación sedienta de éxito que mira ansiosa el reloj en espera de regresar a las prácticas en cuanto la contingencia que vivimos lo permita.

 

El Blog de Puebla Deportes por Cuauhtémoc Hernández