En esta conversación con 24 Horas Puebla, Fernando Morales Martínez jubila a Mario Marín Torres. Muy claramente le dice que el asunto de la política ya no es su tema. Que cuide a sus nietos. Que se vaya de Puebla. Que esté cerca de su familia. Que el desprestigio que carga no se lo va a quitar nunca. Ufff. También puntualiza que agotará todas las instancias posibles en aras de defender su militancia priista. Que no piensa abandonar el partido. Que Blanca Alcalá no estaba preparada para ser candidata. Que no tiene su casa en orden. Que hay que tener la piel muy gruesa para aguantar los vericuetos de una campaña. Ufff. ÚLTIMA PARTE

Por: Mario Alberto Mejía / @QuintaMam

 Foto: Ángel Flores / EsImagen

 

Quisiste ser candidato por Ciudad Serdán en 2015, pero manos priistas lo impidieron. Resultado: el PRI pierde abrumadoramente.
Claro. Se perdió.

¿Tú hubieras ganado Serdán?
Sin duda, ¿no? Creo que lo gané. (Risas).

¿Puedo publicar eso?
Sí. Creo que lo gané. A Manlio (Fabio Beltrones) le dije: “tengo que regresar a mi estado, tengo que ver por mi familia, chambear, aquí no veo. Y me vine a trabajar, Mario. No me vine a operarle al PAN ni mucho menos. Vine a trabajar, a servirle a mi estado. A encontrarme con mis raíces, con mi gente. Y a lo largo de un año, desde que estoy aquí, a nadie se le ocurrió –ni a la presidenta del partido, Ana Isabel Allende– invitarme un café para platicar.

¿Nadie te buscó?
Nadie. Nadie me dijo: “oye, ¿quieres tomarte un café?”, “oye, quiero invitarte a mi proyecto”. Nadie. “Oye, va a haber un evento, un Consejo Político. Te invitamos.” Pero eso, lo que hicieron conmigo, lo hicieron con cientos. Con cientos. O sea, yo lo que quiero que sepas, Mario Alberto, es que he estado hablando con muchos amigos priistas. Y es que no soy yo, somos cientos. Que hagan un análisis de conciencia. Eso sí: nos acusan de traidores. Los traidores son ellos porque no nos tomaron en cuenta. Toda la militancia que está ahí en los pueblos, en las comunidades…

¿Estás hablando de mucha gente?
De mucha gente que no ha sido tomada en cuenta.

¿Y te lo han comentado?
Claro. Ve cuántos de ellos tenían que haber sido los candidatos en 2013. Y no los dejaron pasar por intereses de la construcción de la candidatura a la gubernatura. Ya desde entonces estaban trabajándola. Eran sus intereses e impusieron a su gente. No a los mejores. Y hoy esa gente que se sentía excluida pues sigue haciendo trabajo social en sus pueblos. Y hoy tampoco son tomados en cuenta. Obviamente muchos de ellos se identifican con Tony Gali porque él tiene una gran poblanidad. Y sobre la poblanidad también hay algo muy importante: Tony tiene una gran vida social. Su familia, su esposa, sus padres, sus hijos. Esa poblanidad que desafortunadamente Blanca Alcalá no pudo construir de entrada. No basta con ser poblano, hay que tener la poblanidad adentro, en la sangre. Ella puede ser poblana, entre comillas, pero la poblanidad no se adquiere con un documento. Y Tony Gali sí tiene esa poblanidad. ¿Por qué? Pues porque vivió en la Santa María y porque su familia es una familia de empresarios que le apostó a Puebla. Ahí está toda una historia de poblanidad.

¿Tony Gali es tu amigo?
Sí. Así lo considero.

¿Desde cuándo?
Yo a Tony lo conozco desde hace muchos años. Creo que en los últimos tiempos se ha hecho más cercana la relación. Lo admiro, lo respeto. Es un hombre sencillo, con una gran claridad en las ideas. Ve lo que logró en Puebla, acompañado de la mano del gobernador, obviamente. Hoy Blanca y su gente se ponen a criticar las obras que se hicieron en este gobierno cuando ellos no hicieron nada. Ella dice que va a revivir La Célula que hizo Marín. (Risas). La Célula es un fraude. No sirve ni como terreno ni para ir a tirar el estiércol de las vacas. Es una tierra blanda. Fue un fraude. Se nos olvida que se tardaron tres años y medio para hacer un Centro Expositor y nos dejaron tres años sin feria. ¿Te acuerdas que andaban haciendo la feria en el Parque Ecológico? En este gobierno las obras se hacen rápido, y ahí está la muestra.

¿Has aglutinado a muchos priistas en torno a Tony Gali?
No es que los aglutine yo, Mario Alberto.

¿Te han buscado?
Nos buscan a todos. Se acercan por diversos lados. Vuelvo a lo mismo: no es por traidores. No somos traidores. Nos traicionaron en el otro lado.

¿Ustedes no son nuevos panistas?
¡No! A ver, yo no soy panista. Yo respeto al PAN. Yo respeto a los partidos: al PSI, a Compromiso, a Nueva Alianza, al PT, al PAN. Pero yo no soy panista. Soy priista. Además Tony no está afiliado a ningún partido. Yo estoy con Tony. Es un candidato ciudadano. Yo como ciudadano estoy apoyando a Tony.

¿Cómo ves las encuestas? Las recientes.
Yo creo que las encuestas no se equivocan. El otro día le dije a una persona: “¿Por qué el PRI no saca las encuestas de Buendía & Laredo? Que enseñen la encuesta de abril ¿Por qué no la sacan?”. Sacaron una de Buendía & Laredo, pero de hace tres meses, donde creo que van dos puntos arriba. Pero no sacan la de abril.

¿Salieron mal?
En su propia encuesta. (Risas). Que la saquen. Muero de ganas por verla.

MARÍN: LA POLÍTICA Y LOS NIETOS

Te recuerdo operando por Mario Marín en la sucesión de don Melquiades Morales. ¿Es tu amigo?
Sí, claro. Fue mi amigo. Yo creo que algo debe de quedar de esa amistad, ¿no? Yo con Mario tuve la oportunidad de ser diputado local y diputado federal. Aunque él lo debe reconocer: no quería que yo fuera diputado federal.

¿Por qué?
Porque el mío era el único distrito que quería mandar a Convención de Delegados. Él traía ahí otra propuesta: Isidro Camarillo. Quería ser candidato, pero los números no le alcanzaban. Finalmente tuvo que ceder ante lo que era muy claro: que yo era el candidato que ganaba. Finalmente fui diputado federal. Pero Marín sabe –lo debe estar leyendo– que su corazón no quería que yo fuera.

¿Por qué crees?
Yo nunca me había engrillado con él porque la verdad es que con Mario tuve una gran, gran amistad. Yo lo apoyé para que pudiera ser candidato y estuve ahí con él. Lo acerqué con Roberto Madrazo.

¿Te pagó mal?
Cuando quise ser diputado federal me acuerdo que lo fui a ver. Le dije: “Oye, pues fíjate que me gustaría tener un trabajo, ¿no?”. Y me respondió: “Ah, pues vete de representante del gobierno al DF”. La idea no me disgustaba, pero le dije: “Oye, pero también quiero en un año ver la posibilidad de ser diputado federal”. Esto que te platico nunca ha salido en los medios. Y me dice: “¿Ah, sí? Pues entonces vete de delegado de Sedeso a Tecamachalco”. (Risas). Después de que yo había sido diputado local, miembro del Comité Ejecutivo Nacional, secretario de Gestión Social… (Risas). Mario me vio, pues la verdad, con ganas de chingarme, ¿no? Pero terminé aceptando ser delegado de Sedeso, y con los años se lo agradezco porque me demostró que en la política no siempre estás arriba. Muchas veces te toca estar abajo. Yo había sido delegado del IMSS en el DF. Ahí tenía 16 mil trabajadores y 25 mil millones de pesos de presupuesto. Con todo eso, me fui de delegado de Sedeso, donde tenía 16 trabajadores y cero pesos de presupuesto. Me acuerdo que me hablaron algunos amigos y me dijeron “Cómo eres pendejo. ¿Cómo le aceptaste?”. Esto me demuestra que se puede estar con un candidato presidencial, acompañándolo, como fue mi caso, y que se puede ser con Marín gobernador un pinche gato. Porque me mandó de gato. (Risas). Pero nada es para siempre. De ahí me levanté y fui diputado federal. En otra ocasión yo quería ser dirigente del sector. Tampoco quiso. Y ahí sí me metí a fondo, ¿no? Me metí, me metí, me metí y logré ser dirigente de sector. Juan Carlos Lastiri era el presidente del partido y la relación se fue desgastando, desgastando, desgastando. Creo que Marín es un hombre que no supo respetar su tiempo.

Tú, más que nadie, le ayudaste a ser gobernador. Fuiste el factor clave. Enfrentaste a tu propio padre.
Yo le ayudé. A lo mejor él no lo reconoce ahora, pero mucha gente…

Todo Puebla lo recuerda.
Exacto. Todo mundo lo sabe. Marín lo supo. Y haya sido como haya sido, fue gobernador. Con sus bemoles, con sus problemas, con sus temas. Ahí está. Yo creo que lo que él no supo fue decir “hasta aquí llegué y aquí me retiro”, ¿no? Quiere seguir operando. Lo siento mucho por su familia. Él cometió errores. Él los debe pagar. No la familia. La familia de Mario hoy está pagando todo ese desdén. Hay una denostación en contra suya.

¿A qué atribuyes que Marín no abra los ojos?
Quiere ser senador en 2018. No ha querido darse cuenta que su tiempo político está muerto. Él ya se acabó. Debe asumir eso. Debió haber dejado que alguien de su familia pudiera crecer. No lo hizo y eso le afecta a su familia y a todos los que lo rodean. A la propia Blanca Alcalá le afecta.

¿Ya no tienes contacto con él?
No.

¿Desde cuándo?
Creo que la última vez fue hace un año. En algún evento.

¿Se saludan?
Sí. Yo lo saludé. No sé si ahora me quiera saludar. (Risas). Yo, pese a todo, le guardo, pues, cariño. Le guardo cariño a Mario. Y, sí, creo que le guardo un cariño a pesar de las cosas cómo se dieron. Y sí, sí, siento tristeza por la forma en que se ha manejado, ¿no? Porque, finalmente, la política también es de seres humanos, ¿no? Y ha cometido graves, graves errores. Y los ha tenido que pagar muy caro. Ojalá asuma que su carrera política está muerta.

En el PRI se volvió un paria. Un impresentable. Hasta Blanca Alcalá lo ridiculizó en un spot. ¿Lo viste? Cuando aparece la imagen de Marín y ella dice: “No soy preciosa”.
¿Qué te puedo decir, hermano? (Risas). Es el riesgo de no saber que ya estás muerto. Pero eso sí: ¿qué tal lo andaba placeando Blanca en su arranque de campaña? (Risas). Se les murió el enfermito. (Risas).

¿Marín sigue metido en el PRI?, ¿Marín sigue metido en la campaña de Blanca?
Creo que de alguna manera sí. Los que conocemos la tierra sabemos que está organizando a algunos grupos. No sé con qué intención. Le mando un mensaje a Marín: que verdaderamente se ponga a disfrutar a su familia. Tiene una buena familia. Que se vaya de Puebla ¿no? Que disfrute de sus nietos. Acuérdate que hicieron el intento de mandarlo de delegado del partido a Quintana Roo o no me acuerdo a dónde. ¡Ya le estaban haciendo un desmadre! Lo que pasó con Mario es algo que no se le va a borrar nunca. Debe dejar que esas heridas sanen y hacer una vida eminentemente privada, empresarial, que él pueda dedicarse a hacer varias cosas y olvidarse de este tema de la política. Este asunto ya no es para él.cita fmm

PARA SER CANDIDATO HAY QUE TENER LA CASA EN ORDEN

¿Cómo ves los actos de Blanca Alcalá?
No hay un discurso. Yo no veo un discurso. Solamente son críticas. Los eventos son desangelados. Se les salen las personas. Me da mucha tristeza ver hasta dónde ha llegado el partido. Pero eso se debe a la soberbia.

Si te inician un procedimiento, como dijeron que lo van a hacer, ¿vas a presentarte?
Porque tienes derecho de audiencia.   
¡Claro!

¿Irías a la audiencia con los priistas?
¡Sí, claro! Yo no les voy a regalar mi militancia. Trabajo les va a costar, eh. Y aparte hay muchos procedimientos. No sólo es el derecho de audiencia. Incluso el partido me puede sancionar y me puedo ir al INE y después me puedo ir al Trife en defensa de mis derechos partidistas, ¿no?

¿Agotarías todas las instancias?
¡Claro! Yo voy a agotar todas las instancias. Pero me pregunto si a Rubén Gil…

Es lo que te iba a decir: ¿Cómo le hace Fernando Morales para que su caso, si sea llevado a tribunales, cuando Rubén Gil, Mario Villanueva…
¡Moreira!

Moreira…
¡Y a una serie de priistas distinguidos no les han hecho nada. ¡Nada! ¡Yo creo que sería algo inédito, ¿no? Si ellos dicen que no valgo nada, ¿para qué se distraen en mí?

Después de las declaraciones de Jorge Estefan contra ti, ¿te han hablado algunos priistas para solidarizarse contigo?
Sí, muchos. Muchos amigos.

¿Gente que está en la campaña de Blanca?
(Risas). Yo obviaría algunos.

No digas nombres. ¿Se ha solidarizado contigo gente que está en la campaña?
Hay gente que está incluso en la campaña que la tienen relegada. La tienen ahí sin hacer nada. Porque solamente ahora son tres o cuatro o cinco los que deciden, ¿no?

Trajeron gente de fuera. Diputados de otros estados, de otros distritos fuera de Puebla, para coordinar las acciones porque no confían en los locales. Ricardo Morales publicó que a Javier López Zavala ya lo hicieron a un lado porque no le tienen confianza. ¿A quién le tienen confianza?
Blanca no confía en nadie porque hoy está viviendo lo que otros vivieron: su falta de compromiso. ¿Por qué tendrían que apoyarla? ¿Por qué tendría que ser así? Ella forma parte de un grupo que se ha beneficiado al margen de todos. Blanca no quería ser candidata. Tenía ese discurso: “¡no quiero ser, no quiero ser!”. Cuando le dijeron que sí iría no tenía nada preparado. Y esto se nota porque no tenía ordenadas sus cosas. Su contador debe estar sufriendo ahorita. Mira nada más todo lo que está saliendo. Creo que si entras a una candidatura a la gubernatura debes estar muy claro que te van a encuerar de “pe a pa”. Que te van a sacar la historia de tus amantes, de tus novios, de tus vicios, de tus problemas, de tus negocios. Eso es lo que te van a sacar, porque tristemente a eso se ha reducido la política hoy: a descalificar, a madrear. Si te estás queriendo meter en eso, ten tus cosas en orden, ¿no? Es lo primero que debería de haber hecho, ¿no?

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