El Puebla de la Franja arrancó el torneo con cuatro puntos obtenidos de seis en disputa y con una gran actuación ante Tigres en Monterrey; el cuadro de Nicolás Larcamón ofreció un partido completo en la Sultana del Norte para quitarle lo invicto a Miguel Herrera en el Estadio Universitario y para dejar en claro que esta versión poblana seguirá siendo un hueso duro de roer ya que a la identidad mostrada a lo largo de dos torneos pasados y los dos primeros juegos del actual agregó la madurez, madurez de los futbolistas para tomar mejores decisiones en la cancha y del mismo técnico expresada en mantener en la cancha a los amonestados (algo que no sucedía en los torneos pasados) y así Israel Reyes tuvo que afrontar esa problemática desde el minuto 7, pero la solventó con mucha prestancia haciendo un buen partido en el mediocampo, mientras el canterano Ivo Vázquez vio la tarjeta amarilla al 66 y siguió en una buena demostración del carrilero izquierdo; Antony Silva al 73 y Juan Pablo Segovia al 82 también fueron amonestados por Luis Enrique Santander https://www.youtube.com/watch?v=nbp7hRiegAY.
Larcamón fue fiel a su estilo y en esa virtud radicó la clave del juego, el Puebla fue intenso a la hora de recuperar la pelota y siempre buscó hacer daño cuando la tuvo con un Maximiliano Araújo que atraviesa por su mejor momento desde que llegó al equipo de la Franja porque ha aprendido a tomar mejores decisiones en la cancha y así aprovecha su velocidad y habilidad, al tiempo que la presencia de Ivo Vázquez permite que el uruguayo sea colocado más al frente. Así, esa intensidad en la recuperación de la pelota y la claridad para buscar atacar lo que significaba no cederle toda la iniciativa al rival, significó que cada vez que Tigres esbozó algo de peligro, los visitantes respondieron con las mismas sensaciones y supieron pegar primero luego de una gran combinación que dejó a Araújo en el área ante Nahuel Guzmán para sacar un riflazo que se impactó en el poste y después encontró a Carlos Salcedo para abrir el marcador en San Nicolás de los Garza.
Ni con la ventaja el Puebla se echó para atrás y solventó la reacción de unos Tigres muy ofensivos pero desequilibrados con varios jugadores fuera de la posición que dominan y con otros que viven de algún destello como el francés Florian Thauvin o con un Sebastián Córdova que actuó como contención y no acaba de recuperar la confianza en su juego, al punto que ambos fueron sustituidos. Lo anterior no es culpa del Puebla que encontró la posibilidad de un segundo gol cuando ya se acercaba la finalización del primer lapso. El hecho de no tirarse para atrás quedó representado en la acción del penal, Emanuel Gularte (de buen partido), recuperó un balón en su parcela defensiva y se proyectó al ataque ante la marca de Luis Quiñones, el jugador uruguayo del Puebla mostró una buena conducción y cuando se dio cuenta estaba cerca del área felina por lo que mantuvo el paso y al ingresar a la misma recibió el contacto de Quiñones para que el árbitro marcara la pena máxima que convirtió con prestancia Pablo Parra (otro de los que ha arrancado muy bien el torneo).
Pese a los cambios de Herrera, esa madurez de la que hablábamos antes le permitió al Puebla no sufrir desde el minuto 45 hasta el 60, quince minutos que los Camoteros sobrellevaron sin sobresaltos hasta que en la táctica fija Tigres se fue haciendo peligroso y ahí apareció la figura de Antony Silva quien evitó la caída de su marco al menos en tres ocasiones; Larcamón refrescó al equipo con los ingresos de Alberto Herrera y Lucas Maia, así como más adelante Pablo Parra cedió su lugar a Kevin Ramírez; Herrera volvió a cumplir en el mediocampo y aunque la Franja ya no fue tan peligroso salvo un disparo de Ferrareis que pasó cerca del ángulo de la portería de Nahuel Guzmán, los cambios ayudaron a frenar a los Tigres hasta la recta final donde nuevamente la táctica fija se convirtió en un peligro obligando a Silva a responder y en el que también hubo un recentro de Gignac que se estrelló en el travesaño. Cuando parecía que ya no habría mucho más, Luis Enrique Santander se inventó un penal por una supuesta falta de Israel Reyes sobre Guido Pizarro que Gignac erró al mandar su disparo al poste cuando ya había engañado a Silva.
La victoria poblana es una demostración de lo que ha sido capaz de construir Nicolás Larcamón ya que el equipo tiene un estilo tanto como local como visitante y además ha logrado encontrar puntos altos de rendimiento de los futbolistas. Al finalizar el juego, el timonel argentino destacaba que su Puebla trabaja en equipo y esa es su principal virtud, pero en ese trabajo en equipo hay jugadores que están encontrando un alto nivel como el propio Antony Silva, Emanuel Gularte, Juan Pablo Segovia, Israel Reyes (siempre cumpliendo tanto en la central como ahora en mediocampo por la ausencia de Javier Salas) y Maximiliano Araújo, ahora sí convertido en el hombre desequilibrante del equipo, pero no podemos perder de vista a Ivo Vázquez quien hizo un partido muy serio en el apartado defensivo ante jugadores de mucha jerarquía.
Esa es otra virtud de la versión que vimos del Puebla el sábado en Monterrey, junto a Ivo Vázquez, titular en la defensa, jugaron los canteranos Alberto Herrera, quien volvió a cumplir en el mediocampo, y en los minutos finales Diego Zago quien volvió a tener actividad en Liga Mx tras su debut el 1 de febrero de 2020 en Aguascalientes frente al Necaxa cuando Juan Reynoso lo mandó de inicio en una posición que no era la suya y lo sustituyó tras los primeros 45 minutos. Ahora ante Tigres, Zago entró para cubrir los últimos minutos en su posición, el mediocampo, lo que significó que el Puebla cerró el partido en Monterrey con tres canteranos: Vázquez, Herrera y Zago, con el agregado de que el último es oriundo del estado al haber nacido en Chipilo. A los atributos que Larcamón le ha dado al Puebla ahora hay sumarle la cada vez mayor presencia de canteranos en momentos importantes.
Nicolás Larcamón llegó hace un año al futbol mexicano de la mano del Puebla de la Franja cuya directiva apostó por un técnico muy joven y desconocido en el ambiente lo que le generó severas críticas hasta que el argentino demostró con trabajo su capacidad y ha colocado al cuadro camotero como uno de los más difíciles. En el Clausura 2021 arrancó con un empate en casa frente a Chivas y un triunfo en el Azteca ante Cruz Azul, luego en el Apertura 2021 sumó un empate en Monterrey y una derrota en el Cuauhtémoc frente a las Chivas, ahora ha vuelto a sumar cuatro de seis puntos en disputa y la próxima visita del Tijuana, que si bien suma un punto ha tenido buenos minutos frente a Cruz Azul y sobre todo ante León donde mereció más que un punto, por lo que el reto ahora será no caer en excesos de confianza, justamente hace un año tras el empate frente a Chivas y la victoria en el Azteca ante Cruz Azul, el Tijuana (entonces dirigido por Pablo Guede) se presentó en el Cuauhtémoc y se llevó la victoria con un gol de Fidel Martínez al minuto 13, por lo que la escuadra fronteriza es una de las que no ha podido derrotar Larcamón con el Puebla.
Sin embargo, para tranquilidad de la afición del equipo de la Franja más allá de los resultados, ahora hay un equipo con identidad propia que sabe a lo que juega y que es más maduro tanto en sus futbolistas como en su propio entrenador por lo que aunque esto apenas comienza hay un margen para ser optimistas.
@abascal2
El Blog de Puebla Deportes escribe Antonio Abascal