El desprestigiado dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, pretendió portar ropajes de justiciero para condenar lo ocurrido en el Centro de Salud de la colonia Francisco I. Madero, en la capital de Puebla.
La mañana de esta martes que comenzó la jornada de vacunación masiva, un sujeto presumiblemente apodado “La Zorra”, procesado por el delito de homicidio calificado, narcomenudeo y robo de vehículo, fue agredido por rivales cuando aguardaba en la fila de vacunación.
Hubo daños colaterales: dos menores y un adulto heridos de bala y una enorme expectación por el número de personas que junto con niñas y niños acudían a la primera jornada de inmunización para este grupo etario, que por primera vez recibirían la dosis contra Covid-19.
Con afanes de ave de rapiña, Moreno Cárdenas acusó al gobierno de Puebla de las secuelas de una disputa entre pandillas en un municipio que gobierna el Partido Acción Nacional, aliado del tricolor.
Como se ha visto, el oportunismo no es buen consejero y la ignorancia menos. Eso ha sucedido con la dupla que maneja esa franquicia, disminuida hasta casi la extinción electoral en el país y un creciente desprestigio.
No fue capaz su dirigencia local de ofrecer información mejor y contexto para evitar dejar en una más pronunciada penosa condición a su líder nacional.
La dupla Moreno Cárdenas-Rubén Moreira ha sido reiteradamente exhibida por el desconocimiento o proclive intención de sacar ventaja de la desgracia que ciertamente padece la sociedad en general.
El coordinador de los diputados del PRI, el impresentable Moreira, estuvo en marzo de 2021 para presentar a los candidatos a las diputaciones federales de la alianza PRI-PAN-PRD, entre quienes estaba Jesús Morales Rodríguez, exsecretario de Seguridad con Antonio Gali Fayad, por ejemplo.
Invocó el priísta en esa deslucida ceremonia al fallecido Rafael Moreno Valle, otro priísta que se convirtió al panismo para ser gobernador, como un entrañable mandatario sin advertir que entre quienes ahí estaban había perseguidos y encarcelados de ese régimen.
Ese mismo que empleó a Facundo Rosas, un torvo policía con quien floreció el huachicol y ahora enfrenta un proceso penal por su actuación en el programa “Rápido y furioso”, que permitió que cientos de armas de alto poder entraran por la frontera de Estados Unidos para el cártel con quien Genaro García Luna negoció.
“¡Me niego a aceptar un México en el que se normalice la violencia! Ahora una balacera en un Centro de Salud en Puebla (…)”, escribió Moreno Cárdenas para cerrar el mensaje con que “La ineptitud de Morena es una desgracia para México”.
De entre la reprimenda que recibió en sus redes por ese lance, una refleja con precisión la anómala postura de quien forma parta de la oposición en el país: “El gobierno municipal es panista y llegó con tu alianza ¿si sabías Alito?”.
Y uno más nos recordó la bochornosa imagen de Moreno Cárdenas: “Hoy es martes de Jaguar”, el programa de TV en Campeche desde donde se han ventilado los audios del procaz y falsario justiciero.
@FerMaldonadoMX