La visita del pasado sábado a Puebla del dirigente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, generó repudio entre fundadores y militantes, además de que motivó un pronunciamiento casi unánime en contra de las posibles imposiciones en el partido desde la Ciudad de México.
Fueron la dirigente estatal, Olga Lucía Romero Garci-Crespo; el secretario General en Puebla, Agustín Guerrero; el coordinador de la bancada morenista en el Congreso, Sergio Salomón Céspedes Peregrina; y el exdirigente estatal del partido y actual secretario del Trabajo, Gabriel Biestro Medinilla, quienes acusaron parcialidad en la conducta de Delgado Carrillo.
Durante el proceso electoral 2021, el partido vivió un primer escenario de encono y división en el que la principal pugna fue que desde la capital del país se tomó la decisión de postular a ciertos candidatos que terminaron siendo derrotados por la oposición, principalmente en la zona metropolitana.
Cero imposiciones
La dirigente estatal de Morena en Puebla, Olga Lucía Romero Garci-Crespo, aseguró: “no permitiremos viejas prácticas del antiguo régimen que van en contra de los principios que nos rigen en esta Cuarta Transformación”.
Con el pronunciamiento de “cero imposiciones”, la morenista recién llegada al Comité Directivo Estatal lanzó el mensaje al partido a nivel nacional en el contexto de un posible apoyo parcial a Ignacio Mier.
“Que quede claro: Todas y todos los candidatos de nuestro movimiento rumbo al 2024, incluyendo la candidata o candidato a gobernador, serán electos por encuesta o consulta”.
La morenista fue más allá y señaló que no se trata de un simple método, “es una convicción profunda: en Morena el pueblo manda”.
Horas después, el secretario General del instituto, Agustín Guerrero Castillo, también se pronunció en contra de las imposiciones en el partido guinda.
“Comparto y suscribo la postura de nuestra presidenta electa Olga Romero Garci-Crespo, sobre el derecho del pueblo a decidir las candidaturas de Morena”.
GENERA DIVISIÓN
Gabriel Biestro Medinilla, exdirigente estatal de Morena en Puebla, también reprochó la actuación de Mario Delgado Carrillo como dirigente nacional.
“Imposición no es unidad”, le reclamó ante el comportamiento que tachó de parcial y faccioso en favor del diputado Ignacio Mier Velazco.
El secretario del Trabajo a nivel estatal expuso que Delgado Carrillo ha dejado mucho que desear como dirigente nacional, y lo llamó a someterse a una consulta de revocación ya que está generando confrontación entre diversos grupos.
Por otra parte, acusó que perfiles, como el del priísta Enrique Doger Guerrero, no deberían buscar refugio en Morena, sino responder ante la justicia por sus escándalos de corrupción.
De la misma forma, dudó de la credibilidad de las versiones que señalan que un perfil como el de Francisco Ramos Montaño, exyerno de Rosario Robles, pueda llegar a la Delegación del Bienestar.
NO MENTIR
Por su parte, el diputado morenista y coordinador de la bancada en el Congreso del Estado, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, criticó el acto político del fin de semana.
El aspirante a la gubernatura exigió a la dirigencia nacional del partido lopezobradorista piso parejo y reclamó una conducta parcial de Mario Delgado.
Dijo que el dirigente partidista está obligado a respetar la institucionalidad en Morena, por lo que debe seguir estatutos y lineamientos, aunque le ofreció su voto de confianza; reafirmó: “que venga y nos levante la mano a todos”.
Biestro Medinilla y Salomón Céspedes también criticaron la promoción personalizada y simulación del informe del diputado Mier durante el fin de semana.