La gira del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, más que institucional, se inscribe en la carrera por la candidatura a la presidencia en 2024 por Morena.
De eso trata el periplo de quien conduce la política interna en México y quien es el responsable de la gobernabilidad en la república.
Antes de estar en Puebla este viernes, tocó base en Veracruz. Quienes conocen la historia política del país, sabrán que no ha habido un sólo político, sin distingo de partido, color o ideología, que no haya buscado el aplauso en ese escaparate que primero fue el Café de la Parroquia y ahora es El Gran Café del Portal.
No sólo es el punto que mayor exposición mediática tiene -ahí llegan todos los reporteros que buscan a políticos locales, líderes agrarios o ganaderos-, sino que tiene un enorme simbolismo.
Desde Porfirio Díaz, Carlos Salinas, Cuauhtémoc Cárdenas, Manuel Clouthuier o el propio Andrés Manuel López Obrador, no existe un sólo aspirante a ser presidente que haya trazado agenda y estrategia sin pisar ese emblemático lugar lleno de meseros de rostro adusto y buenos lecheros.
La imagen que inundó redes y emisiones informativas con el secretario de Gobernación haciendo alarde de habilidades para tocar la marimba a las afueras de ese lugar se debe a eso, la búsqueda del reconocimiento popular.
El funcionario que estará este viernes para atender una nutrida agenda que incluye firma de convenio con el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, una reunión con el consejo estatal de su partido y un encuentro con empresarios apuesta a eso, en forma inequívoca.
Confirma la versión planteada por el periodista José Ureña en la columna Teléfono Rojo en el sentido de que las primeras reglas de competencia entre las llamadas “corcholatas” ya fueron planteadas desde Palacio Nacional.
De acuerdo con la entrega del martes 10, “se les dio a conocer la biblia según el sumo pontífice de la República Mexicana, amo y señor de sus cuatro horizontes y de los designios de su movimiento y futuro”.
El secretario de Gobernación tiene un reto formidable: alcanzar y superar a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheimbaum y al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard que gozan de un porcentaje mayor de conocimiento y aprobación en todas las mediciones hechas.
“La encuesta -o varias, eso se decidirá después- para designar al candidato presidencial morenista será de verdad, organizada por empresas confiables para no dar lugar a dudas”, escribió Ureña.
La carrera por la sucesión presidencial entró en una nueva etapa. Los tres competidores de López Obrador aprietan el paso de manera decisiva.
Por eso tiene razón quien ha anticipado que la presencia del secretario de Gobernación en Puebla no tiene como propósito ulterior levantar la mano a Ignacio Mier Velazco, otro pretendiente a una candidatura por Puebla.
Hay una justificación que aplica en la lógica de la política y que supera calenturas y urgencias en la política profesional: antes que el 2, está el 1.
@FerMaldonadoMX