El efecto Shakira es de dimensiones apocalípticas una mezcla de traición, marketing y karma que está cayendo sobre la cabeza del exfutbolista español, Gerard Piqué, y su actual pareja, Clara Chía, quienes están condenados por la opinión pública como unos traidores, ahora inmortalizados en la canción BZRP Music Session #53.

A diario, la gente se separa y rehacen sus vidas, pero siempre hay que cuidar los tiempos y formas. Shakira en vez de ponerse a llorar, tomó papel y lápiz para hacer lo que sabe hacer y bien: componer rolas, y vaya que les dio con todo: “las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan”.

Y ¿cómo fue que la barranquillera pasó de llorar a moco tendido a ser una empresaria que está ingresando cualquier cantidad de euros a su cuenta, a costa de una infidelidad?

Bueno, Shakira hizo un buen storytelling, o sea, se puso a contar una historia, con la cual conectó con sus usuarios, eso que me he pasado años mencionando por todos lados que es lo importante a la hora de comunicar y que te hace tener audiencias fieles: “la gente olvidará lo que dijis- te, la gente olvidará lo que hiciste, pero la gente nunca olvidará como la hiciste sen- tir”, y Shakira se mostró auténtica y honesta con sus seguidores, esto la colocó en una superposición en la que siempre o la mayoría de veces la defienden.

Con más de 93 millones de reproducciones en menos de 24 horas, sólo en YouTube, es obvio que Shakira está facturando y ¡vaya que lo hace bien!

Un traidor siempre es un traidor y a veces, a alguien así, darle una segunda oportunidad es como darle otra bala, porque en la primera falló el tiro y, como dice mi abuelita, al buen entendedor… ahora, si no entendiste –también como dice mi abuelita– cada quien busca su cebolla para llorar.

Finalmente hay que decirlo: si no te gusta la canción de Shakira, sólo hay de dos sopas: o eres infiel o eres la amante.

RECONOCEN A PERIODISTAS. EN VIDA, HERMANO, EN VIDA

En conmemoración del Día del Periodista fui distinguido, al igual que otros colegas, por la Comisión Iberoamericana de Derechos Humanos y la Federación Mexicana de Periodistas, recibiendo un reconocimiento en las instalaciones de LOA Inn Hotel de cuerpo presente, vivito y coleando, por estos primeros 20 años de hablar y dar de qué hablar.

Y hago una breve reflexión citando uno de los poemas más conocidos de Ana María Rabatté, oriunda de Tamaulipas y fallecida en febrero de 2010 en su ciudad natal, quien con sus escritos invitó a expresar el amor hoy y no esperar a la muerte. El poema es una chulada y fue titulado En vida, hermano, en vida.

No esperes a que se muera la gente para quererla y hacerle sentir tu afecto. En vida, hermano, en vida…

Los medios de comunicación por sí solos ¿qué comunicarían? Son sólo máquinas, oficinas, cables y tecnología.

La columna de esta semana ha terminado, pueden ir en paz.

 

El Confesionario

Por: Ray Zubiri