Y a todo esto, ¿quién es “Fojaco”? Y tú me lo preguntas, “Fojaco” eres tú
Ha trascendido, en algunas columnas periodísticas de por aquí cerquita, un personaje conocido en el bajo mundo de la política como el licenciado “Fojaco” acompañado por su fiel compañero, el “licenciado Popócatl”. Dice la H. Redacción que también quiere que le digan la “licenciada H.”, porque en México todos somos licenciados hasta que se nos demuestre lo contrario. Todos somos Fojaco, todos somos Popócatl, todos somos Malagón, Manubrio, Menchaca y un largo etcétera.
El PRI fue la mejor fábrica de “Fojacos”, de los licenciados arribistas, gandallas, abusivos que cuando tenían suerte se convertían en funcionarios de gabinete, líderes de partido o representantes sindicales.
Abusivos, presidentes de colonias que sirven para acarrear antes para el tricolor ahora con el PAN y Morena. No tienen principios, son graciosos, alcohólicos, tienden a hacer el ridículo cuando se emborrachan en restaurantes y en su casa están solos. Robaban urnas, aprendieron a manipular campesinos. Muchos lectores se han sentido identificados, otros se han reído.
Los “Fojacos” no se han ido, pensamos que con la llegada de Morena desaparecerían, pero no, ahora están incrustados en las campañas de Mier y de Armenta. De Pepe Chedraui, de Mario Riestra, porque hasta en la prensa se reproducen como cucarachas. El mundo sería mejor sin “Fojacos”, pero son una plaga que no se puede controlar. Así que parafraseando a Gustavo Adolfo Becker ¿quién es el licenciado “Fojaco”? Y tú me lo preguntas…
¿Será?
Temporada de chapulines
Que el nuevo Diccionario de Mexicanismos propios y compartidos (Academia Mexicana De la Lengua AC, 2023) nos presenta entre sus definiciones Chapulín. Y debido a que la plaga política y que ahora que regresaron a la actividad pública los morenovallistas y los veremos en Morena o en el Partido Verde, nos atreveremos a citar tan profunda definición.
Úsela con él, (la) político (a) que más le convenga.
Chapulín, na. Referido a persona oportunista y advenediza que cambió de bando de forma continua, son congruencia ideológica. “El delegado sindical chapulineó y ahora es subjefe de departamento”.
Los chapulines son síntoma de lluvias, sólo que, en Morena, Partido Verde, Fuerza por México se adelantaron a los chubascos.
¿Será?