El piloto mexicano, Sergio Pérez, selló una nueva remontada para conseguir su primer podio en el Gran Premio de Hungría, con un tercer lugar final tras una intensa remontada luego de salir en la novena posición.
A pesar de que Checo realizó un arranque conservador y no atacó de manera inmediata a los pilotos que tenía por delante, Red Bull estableció una estrategia en la que buscó únicamente dos paradas a pits para ambos pilotos, que obligó tanto a Sergio como a Max Verstappen a tener una gestión de neumáticos impecable.
Con una salida agresiva en la parte de arriba, Lewis Hamilton no hizo valer su pole position ganada el sábado en la clasificación, para verse superado por el actual bicampeón del serial, junto a ambos McLaren de Lando Norris y Oscar Piastri.
Salvo las diez posiciones ganadas de George Russell, el mexicano consiguió la segunda mejor cantidad de lugares recuperados en lo que fue un cierre de alarido, por el ataque que buscó Hamilton en la última vuelta del evento al tratar de arrebatarle el tercer sitio al tapatío en Hungría.
Tras un intenso rebase a Oscar Piastri en la vuelta 47, la estrategia funcionó para Red Bull para obligar a Hamilton a renunciar al podio y dejar una lucha final entre Sergio y Norris por el segundo lugar, que duró hasta la vuelta 65.
En lo que significó otro fin de semana sin mayores complicaciones para Max Verstappen, el neerlandés logró un nuevo Gran Premio con 26 unidades tras conseguir la vuelta más rápida, para llegar a 281 puntos con su noveno triunfo del año, mientras que Checo Pérez se mantiene como segundo en el campeonato mundial, producto de 171 unidades.
El tráfico al final del circuito y el mismo desgaste de los compuestos, orillaron al mexicano a renunciar a un segundo sitio en las últimas cinco vueltas, para resguardar lo que significó su sexto podio del año y una histórica actuación en el Hungaroring a nivel personal.