Integrantes del Frente Nacional de Deudores Alimentarios capítulo Puebla instalaron un tendedero en el Parque del Migrante para exhibir nuevamente a hombres que incumplen con sus obligaciones de la pensión alimenticia para sus hijos, quienes llevan en promedio 7 años incumpliendo.
Mediante este ejercicio de acción ciudadana, esta colectiva integrada por madres que exigen justicia para sus hijas e hijos, busca concientizar a la sociedad sobre la persistencia de la violencia económica como un medio de control que los progenitores ejercen, afectando tanto a las infancias como a las mujeres.
¿Qué piden las madres?
En su pronunciamiento, las madres voceras del movimiento exigieron al presidente del Congreso del Estado, Eduardo Castillo López dar celeridad a la discusión de la iniciativa denominada Ley Sabina, para que todas las medidas que contempla entren en vigor y se garantice la obligación alimentaria, incluido el Registro Estatal de Deudores.
Así mismo, urgieron a todos los diputados a revisar, discutir, adecuar y aprobar todo instrumento normativo que contribuya a garantizar el derecho de niñas, niños y adolescentes a gozar de una pensión alimenticia integral y digna así como a vivir una vida libre de violencia.
Actualmente, el Frente tiene registrados más de 150 casos denunciados que representan más de 200 menores de edad afectados, sin embargo, advierte la existencia de muchos más casos.
En promedio estos progenitores llevan más de 7 años incumpliendo con sus obligaciones y algunos nunca han aportado para la manutención de sus hijas e hijos, situación que no solo se debe a la irresponsabilidad de los hombres denunciados sino al elevado retraso en la resolución de las denuncias y demandas, lo que además constituye un acto de violencia institucional.
Según la información recabada por esta colectiva, la mayoría de los deudores radican en el municipio de Puebla, aunque registran casos de municipios como Atlixco, Ciudad Serdán, Cholula, San salvador el Seco, Cuautlancingo, Amozoc, Tepeaca, entre otros.
Las madres denunciantes indican que, además de incumplir con la pensión alimenticia, estos hombres ejercen violencia psicológica, física y emocional pues manipulan, amenazan, se esconden con ayuda de familiares y amistades que les encubren, renuncian a sus empleos, ocultan ingresos o propiedades, falsean domicilios; empresarios, comerciantes, empleados, funcionarios públicos, profesores, integrantes de partidos políticos y organismos sociales, son algunas de las características que pueden leerse en las lonas y carteles.