La Quinta Columna
Por: Mario Alberto Mejía / @QuintaMam
La noche en la que la diputada federal priista Xitlalic Ceja se dijo víctima de un asalto de las diversas policías poblanas, en realidad estaba repartiendo dinero black –dinero negro, dinero oscuro, dinero fuera de la ley– proveniente del CEN del PRI y de la Operación Zafiro.
El hipócrita lector se preguntará: ¿Qué es la Operación Zafiro?
La respuesta es sencilla y nos la han dado varios priistas ligados a nuestro personaje: es una trama creada por la mente de Manlio Fabio Beltrones –ilustre perdedor de siete gubernaturas en una sola jornada– para conseguir “votantes promovidos” a cambio de dinero sucio.
La operación es simple y llana como la suma de 2 más 2: la coordinadora general por distrito –en este caso: Xitlalic Ceja– se encontraba en su oficina pagando a un buen número de reclutadores cuando apareció la policía y ocurrió lo que todos sabemos: gritos, protestas, llamadas telefónicas.
Xitlalic culpó a la policía de todos los males del mundo mientras pedía auxilio a sus dirigentes con el fin de que llegaran a salvarla.
Dicho escándalo logró su objetivo.
Y es que los uniformados y los ministeriales ya no pudieron incautar los casi dos millones de pesos que la diputada estaba pagando por la operación ilegal.
Y es que su acción se encuadraba en un delito brutal: lavado de dinero.
Un día antes de los comicios que le quitaron la vida política a Blanca Alcalá Ruiz, el diputado federal Víctor Manuel Giorgana –al decir de fuentes ligadas a él– llegó a un salón de uso múltiples de la Unidad Habitacional La Margarita con cerca de 2 millones y medio de pesos.
La Operación Zafiro estaba en marcha.
Giorgana empezaba a repartir el dinero black –es decir: a violar varias leyes federales simultáneamente– cuando un grupo de hombres armados apareció en el lugar y despojó del efectivo a quien pretende ser el candidato del PRI a la Presidencia Municipal en 2018.
(Jura que tiene todo para ganar).
Una vez cometido el asalto, Giorgana apeló a la buena voluntad de los corrompidos para que hicieran el trabajo sucio sin recibir por esta vez la cuota cotidiana.
Los priistas están furiosos por varias cosas.
No se sintieron tomados en cuenta, se consideran usados y creen que mientras ellos se partieron el lomo trabajando, otros como Víctor Giorgana y Anuar Cuaik –hombre de confianza del secretario de Finanzas del CEN del PRI, Luis Vega– sólo estuvieron por el dinero.
Cuaik, hay que decirlo, es el coordinador de Finanzas de la Secretaría que encabeza Luis Vega.
Llegó a Puebla y se hospedó con sus operadores y maletas en el Camino Real La Vista.
Adicto al golf, logró que le dieran acceso al club de La Vista.
Ahí se le podía encontrar –en el hoyo nueve, en el hoyo 12– mientras la candidata del PRI recorría el estado con el alma en vilo.
Desde ahí daba órdenes para mover el dinero black que trajo para la campaña.
Los priistas aseguran que entre Cuaik y Giorgana lograron sacar raja del dinero enviado para los temas de activismo y la promoción al voto, lo que generó severos problemas a la estructura.
Dichos conflictos estallaron el día de la elección.
Otro de los cómplices de Giorgana en estas operaciones irregulares fue Raúl Pérez Carreón, quien pasó de ser el secretario de Organización a coordinador estatal de Activismo.
Estas historias empiezan a circular en el contexto de un PRI desolado.
Este lunes corrió la versión de que Blanca Alcalá no quiere volver a aparecer en público en los próximos días luego de su brutal derrota.
A diferencia de los días anteriores, el PRI de la Diagonal lució desolado.
Sólo acudieron al mismo Silvia Tanús y Mario Conde, el frustrado jurídico del partidazo.
O mejor dicho: expartidazo.
Los Galileos
Si usted escucha hablar en estos días y en los meses que vienen de los Galileos no se sorprenda: son los hombres y mujeres más cercanos a José Antonio Gali Fayad, virtual gobernador electo de Puebla.
Los Galileos participaron con Gali en la campaña y se aprestan a formar parte del gabinete que arrancará el 1 de febrero de 2017.
Ya daremos mayores datos de ellos en próximas columnas.
