Ya en la escuela nos enseñaron en diversos momentos que democracia proviene de las voces griegas dēmos, “pueblo”, y kratos, “poder”, es decir “el poder del pueblo”. Así los sistemas democráticos se distinguen de otras formas de gobiernos como las dictaduras, la autocracia y los autoritarismos.

El reto es aplicar el sistema en prácticamente todos los sectores, organismos y entes que de una u otra forma impactan en la sociedad. Entre ellos la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, BUAP.

En una reciente entrevista, la rectora de la máxima casa de estudios, la doctora María Lilia Cedillo Ramírez, detalló que de 37 universidades autónomas que existen en el país, sólo siete, aproximadamente, eligen a sus autoridades, entre éstas la BUAP. Esto va de la mano con la reforma integral al Reglamento de Elección de Autoridades Personales Universitarias, que permite que profesores, investigadores asociados, no necesariamente titulares, participen como candidatos a la dirección de unidades académicas.

Si analizamos algunas de las características de la democracia, como la igualdad de los individuos ante la ley, que implica que todas las personas reciban un trato justo y equitativo, estamos frente, precisamente, a una determinación de hacer de la vida democrática, el día a día en la BUAP. Atender la voz del pueblo, en este caso los universitarios.

Otra característica de la democracia es el respeto por las libertades individuales fundamentales y los derechos humanos. Y es precisamente este punto el que, trata de asegurarse entre otros, en la vida de la comunidad universitaria.

De acuerdo con lo señalado por la rectora María Lilia Cedillo Ramírez, ante la falta de autorización de plazas de académicos titulares, por parte de autoridades federales, cuentan con pocos profesores en dicha condición, lo que limitaba las posibilidades de participación de la comunidad universitaria.

Y justamente la reciente modificación al reglamento asegura, en palabras de la rectora, una vida armónica en las escuelas, facultades e institutos, al derivar del mismo una serie de procedimientos directamente relacionados con la elección de las autoridades de cada unidad académica.

Fue en la III Reunión del Consejo Universitario, celebrada en marzo, que la reforma integral al citado reglamento ofrece a la comunidad universitaria certeza y confianza que legitiman estos procesos y especialmente, que los abren a la libre participación.

El tema da para mucho más, sobre todo si se toma en cuenta que este 2024 habrá, por lo menos, 10 procesos de elección de directores de unidades académicas; vale la pena analizar la reforma a detalle, pues la democracia en la BUAP está en marcha.

Por: Jésica Baltazares

Me encuentran en X como @jesibalta 

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