El excoordinador de campaña de Blanca Alcalá reitera el abandono que padeció el PRI en el trayecto al 5 de junio
Por Mario Galeana
Alejandro Armenta Mier no calla. La estrepitosa caída electoral de su partido –la peor en las últimas dos décadas– no lo alejaron de la escena mediática. Su activismo sigue vigente y contrasta radicalmente con la postura asumida por la excandidata Blanca Alcalá Ruiz y del líder estatal del PRI, Jorge Estefan Chidiac, quienes incluso han reservado sus apariciones en público.
El excoordinador de la campaña de Alcalá Ruiz lo mismo habla de la salida de Manlio Fabio Beltrones de la dirigencia nacional del PRI, que del abandono que sufrieron en los pasados comicios o los errores cometidos en el proceso electoral.
Por ejemplo, en una de sus más recientes entrevistas, Armenta Mier afirmó que “hubo omisión” por parte del gobierno federal para atender las irregularidades denunciadas por el PRI en Puebla a lo largo de la campaña electoral.
A decir del también diputado federal priista, ni el gobierno federal ni la Procuraduría General de la República (PGR) atendieron con plenitud las denuncias que el Comité Directivo Estatal (CDE) presentó por la detención de camiones que transportaban propaganda del tricolor, así como la supuesta intervención de líneas telefónicas de actores del partido.
“Yo te puedo decir con toda claridad que hubo omisión. Tuvimos incluso que ir al Senado (a denunciar las irregularidades). (Incluso) cuando tuve que caminar 15 kilómetros en la autopista para llamar verdaderamente la atención. Porque era una llamada de atención al gobierno federal, a la Procuraduría: ‘oigan, vengan a ver lo que está pasando en Puebla’”, aseveró en una entrevista con el locutor Fernando Canales, de Ultra Noticias.
Apenas el pasado domingo, el CDE emitió un comunicado donde apuntó que las conversaciones de algunos priistas fueron “grabadas ilegalmente” e interpretadas “de manera dolosa” a través de versiones periodísticas, por lo que anunció que presentaría una denuncia, sin que a la fecha se sepa si la querella obra en poder de las autoridades de procuración y justicia.
El comunicado de la dirigencia estatal del PRI pretendía descartar las versiones periodísticas sobre un posible acuerdo electoral entre el gobierno federal y la administración estatal de Rafael Moreno Valle.
Lo anterior, después de que Armenta Mier afirmara en una conversación en WhatsApp grupal sostenida entre coordinadores priistas que “en Puebla no perdimos, nos entregaron. Esa es la verdad y todos lo sabemos”, señalamiento que supone un reclamo hacia el presidente Enrique Peña Nieto y el secretario de Gobernación federal (Segob), Miguel Ángel Osorio Chong, a quien el CDE priista manifestó su “particular” y “absoluto respaldo, reconocimiento y confianza” en el comunicado.
En el círculo de la política poblana se suponía una relación entre Osorio Chong y Armenta Mier, puesto que este último fungió como titular del Registro Nacional de Población (Renapo), el cual depende de la Segob.

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Advertí la debacle si no había alianza: Armenta
Durante la entrevista, Armenta Mier criticó que al PRI nacional “no le alcanzó la negociación” para coaligarse en Puebla con los partidos del Trabajo (PT) y Nueva Alianza (Panal), lo que calificó como “un error interno” que a la postre derivó en la más estrepitosa caída del tricolor en las urnas.
“¿Por qué en todos los estados de la República (el PRI) sí se fue con el PT y el Panal? Ese es un asunto interno”, lanzó.
Afirmó que una semana antes de la toma de registro de Alcalá Ruiz como candidata al gobierno de Puebla, que se celebró el 28 de febrero pasado, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI y Beltrones Rivera sabían que el PAN y las alianzas que tejió con otros cuatro partidos –incluido el PT y el Panal– tenían al menos 220 mil votos de ventaja.
“Presenté un estudio donde teníamos 220 mil votos abajo tan sólo en las fórmulas. Ya sabíamos cómo estaba”, consideró.
El PAN anunció la megacoalición de cinco partidos que abanderaría José Antonio Gali Fayad, hoy gobernador electo, el 24 de febrero.
Un día después, la concreción de dichas alianzas fue interpretada por el columnista Ricardo Alemán como una clara prueba de que el PRI habría pactado la elección en el estado, en perjuicio de Alcalá Ruiz.
“Moreno Valle consiguió que el PRI le regalara las franquicias estatales del Panal y el PT. Dicho de otro modo, que el gobernador de Puebla consiguió antes del proceso electoral los votos necesarios y suficientes para que su candidato y su partido, el PAN, consigan la victoria en la elección del 5 de junio próximo, para renovar el gobierno estatal (…)
“Queda claro que ni Nueva Alianza ni el PT se mandan solos. Es decir, obedecen a un interés superior, a su verdadero ‘patrón’, que es el PRI. Y en Puebla servirán al PRI a través de facilitar la victoria de Moreno Valle y del PAN”, escribió en su columna Itinerario Político, que se publica en El Universal.
Blanca se quedó sin apoyo
El diputado federal Armenta Mier también dijo que Alcalá Ruiz fue “invitada” a ser candidata, en alusión a que, en realidad, abanderó al PRI en el proceso electoral de este año, y no durante los comicios del 2018 como deseaba realmente, según versiones periodísticas.
“Aprendí a querer políticamente a Blanca Alcalá en la campaña, por como la vi luchar. Y… a Blanca Alcalá la ‘invitaron’ a ser candidata”, dijo.
—¿No la presionaron un poco? –inquirió el locutor Fernando Canales.
— Por eso, la ‘invitaron’ a ser candidata —contestó Armenta.
— Decían que ella quería esperarse hasta 2018 —comentó el conductor.
— Y con toda legitimidad y con todo derecho. Como yo no tengo collar ni tengo cadena, ni hay una manita detrás de mí diciéndome qué hacer, yo sí puedo decir esto —añadió.
“En esa lógica —remató Armenta Mier–, a Blanca le quedaron a deber muchas personas importantes”.
A finales de enero, Alcalá Ruiz fue destapada como candidata al gobierno de Puebla por su padrino político, el coordinador del grupo parlamentario del PRI en el Senado de la República, Emilio Gamboa Patrón.
Versiones periodísticas dieron a conocer que la priista fue convencida por el propio Emilio Gamboa de participar en el proceso electoral y le habría garantizado todo el apoyo para obtener el triunfo.
Tras aquel destape, sin embargo, Gamboa Patrón no volvió a respaldar públicamente a Alcalá Ruiz sino hasta el segundo mes de la campaña electoral.
En una rueda conjunta que ofreció con Beltrones Rivera el 17 de mayo pasado, Gamboa Patrón justificó su ausencia en la campaña priista por un problema familiar.
“Me ausenté no sólo en esta campaña, sino de todas las campañas. Fue por una necesidad muy personal que, afortunadamente, estoy casi seguro de que ya salimos adelante. Pero quiero decirles: Blanca no necesita de mi presencia física; la tiene moral, la tiene siempre que me necesite”, declaró.
