La mañana de este miércoles 14 de agosto, la comunidad universitaria de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) vivió un doble festejo que marcará un nuevo capítulo en la historia de la institución. La esperada inauguración de Ciudad Universitaria 2 (CU2), ubicada en Valsequillo, no solo representó la apertura de un espacio académico que albergará a más de cuatro mil estudiantes en 27 programas distintos, sino también la bienvenida de dos inesperados y adorables miembros: Pinto y Maya.
Estos dos perritos mestizos, ataviados con chalecos que llevan orgullosamente sus nombres, “CU2 Pinto” y “CU2 Maya”, se convirtieron rápidamente en las estrellas del evento. Con su presencia, lograron conquistar los corazones de estudiantes, profesores y autoridades, quienes no pudieron evitar sonreír ante la ternura y carisma de los nuevos “guardianes” del campus.
La inauguración oficial, encabezada por el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, y la rectora de la BUAP, Lilia Cedillo, fue un evento de gran relevancia para la comunidad. No obstante, Pinto y Maya, con su dulce presencia y comportamiento ejemplar, se robaron el protagonismo. Ambos perritos no solo son ahora figuras queridas dentro del campus, sino que también han asumido un papel simbólico como protectores de la seguridad y bienestar de los estudiantes.
El nuevo campus CU2, una extensión crucial de la BUAP, ha sido diseñado para ofrecer un entorno académico moderno y acogedor, y la inclusión de Pinto y Maya como sus vigilantes caninos refleja un compromiso con la seguridad de los estudiantes que trasciende lo convencional. Lejos de ser una tarea difícil, su función parece natural para ellos, mientras recorren el campus, brindando una mezcla única de protección y cariño a todos los que cruzan su camino.
En medio de la modernidad y el avance académico que representa CU2, la presencia de estos dos perritos añade un toque humano y entrañable que promete fortalecer el sentido de comunidad entre todos los que formarán parte de esta nueva etapa en la BUAP. Pinto y Maya no son solo dos perros; son, en muchos sentidos, los embajadores de la calidez y el espíritu de compañerismo que caracteriza a esta universidad.
Así, mientras el campus se prepara para recibir a los miles de estudiantes que comenzarán sus clases en las nuevas instalaciones, es probable que muchos sientan que Pinto y Maya han hecho que CU2 se sienta como un verdadero hogar desde el primer día.