Un tribunal argentino ratificó este miércoles la condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos a la expresidenta Cristina Kirchner, por el delito de administración fraudulenta.
No obstante, la pena no será ejecutada hasta que la Corte Suprema se pronuncie sobre el caso.
La Cámara Federal de Casación Penal resolvió “imponer a Cristina Elizabeth Fernández de Kirchner una pena de seis años de prisión, inhabilitación especial perpetua para desempeñar funciones públicas, las accesorias legales correspondientes y las costas del proceso, por hallarla responsable penalmente del delito de administración fraudulenta en detrimento de la administración pública”. El fallo fue leído en vivo y difundido públicamente.
La exmandataria, de 71 años, ya había sido sentenciada en 2022 en primera instancia a seis años de prisión e inhabilitación política perpetua por “administración fraudulenta” en relación con la asignación de contratos viales durante su gobierno. Ahora, esta sentencia ha sido confirmada por un tribunal de mayor jerarquía.
En caso de que alguna de las partes recurra el fallo, será la Corte Suprema de Justicia quien emita una resolución final. Mientras tanto, Kirchner no será detenida ni se le impedirá ejercer cargos públicos.
Además de haber sido presidenta de la Nación entre 2007 y 2015, Cristina Kirchner ocupó la vicepresidencia entre 2019 y 2023.
Este fallo era previsible para la exmandataria, quien el día anterior había publicado una carta titulada “Los Copitos de Comodoro Py”. En ella, aludió tanto a los vendedores de copos de azúcar, involucrados en el intento de asesinato en su contra en 2022, como al tribunal que dictó el veredicto en su contra.
“La ‘Causa Vialidad’ comenzó como un espectáculo mediático y terminará de la misma manera”, expresó en su carta, y sostuvo que el fallo tiene como objetivo proscribirla “de por vida”.