Tiempo de adelantados
En el PRI poblano todavía no ha terminado el duelo por la peor derrota electoral de los últimos 20 años y cada día aparecen más aspirantes a la gubernatura de 2018. El turno ahora fue de Alberto Jiménez Merino. El ingeniero agrónomo, uno de los priistas que más ha recorrido la entidad, tiene como principal padrino político al ex gobernador Mario Marín Torres, quien prácticamente lo dejó solo en la elección del candidato a la minigubernatura pero antes lo utilizó para ejercer la presión necesaria, a fin de alcanzar sus intereses políticos. Tras conocerse el destape, no faltó quien opinara que la promoción realmente es para conseguir un puesto en la fórmula de abanderados al Senado. ¿Será?
La discusión en pleno
La zanahoria puesta por el subsecretario de la Sedatu, Juan Carlos Lastiri Quirós, en el PRI poblano y disfrazada de propuesta para que se consulte a la base la designación del próximo candidato a la gubernatura todavía no termina de cuajar. Si bien ha generado reacciones entre los aspirantes, el planteamiento todavía está muy lejos de concretarse. Priistas bien informados nos dicen que la estrategia del funcionario federal pretende encarrilar las cosas para que no haya otra opción, pues hay riesgo de que si elige a las encuestas como método de selección, entonces el grupo político lastirista no tendrá ninguna oportunidad de entrar a la puja. ¿Será?
Veto indispensable
El gobierno federal metió reversa rápidamente a la propuesta del senador priista Emilio Gamboa Patrón de obligar a los empresarios proveedores del sector público a presentar sus declaraciones patrimonial, fiscal y de no conflicto de intereses. Con esta medida se elimina una guerra innecesaria con la Iniciativa Privada. Lo único que falta por conocer es cuál será el costo que pagará el jefe del grupo político al que pertenece Blanca Alcalá Ruiz.
Inmovilidad perredista
El reacomodo que traerá la elección de un nuevo dirigente nacional del PRD podría generar un efecto de cascada en diferentes entidades del país, pero no en Puebla. ¿La razón? El cacique del perredismo poblano, el senador Luis Miguel Barbosa Huerta, no pretende cambiar a una incondicional, pese al resultado obtenido en las urnas el pasado 5 de junio.
