Los datos del Inegi señalan que 9 de cada 10 personas en Puebla han sido víctimas de actos de corrupción, señaló el politólogo Alejandro Guillén
A los poblanos, los actos de corrupción les cuesta 2.130 millones de pesos al año, esto es lo que reflejó en su última estadística la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, algo que hace sentido con el incremento de actos corruptivos de los cuales han sido víctimas nueve de cada 10 personas como lo reporta el Inegi, comentó el politólogo Alejandro Guillén.
“Si hacemos un recorrido, en el periodo de Melquiades Morales, Puebla ocupaba el último lugar en índice de transparencia; es decir, la corrupción estaba en su mayor nivel. De ahí, en la época de Mario Marín, este tema fue mejorando relativamente y pasamos del último lugar nacional a estar a la mitad de la tabla; sin embargo, hoy en Puebla -aunque se diga que hay menor percepción- la entidad registra un 87.8 por ciento de nivel de corrupción entre la sociedad”, señaló el académico e investigador.
En entrevista con 24 Horas, el autor del libro “Anatomía de la Corrupción en Puebla 2024” indicó que la importancia de analizar el comportamiento de este delito a nivel estatal es porque esto termina impactando en el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de la entidad y esto se ve reflejado en que la entidad ocupa el lugar 29 de 32 en aportación económica al país y cómo esto impacta en el incremento de índice de pobreza y pobreza extrema.
“Los países y estados con menor índice de percepción de corrupción tienen al mismo tiempo un mayor PIB per cápita, es decir, un mayor ingreso por persona en lo que se refiere a los aspectos monetarios que implican mejor calidad de vida de la gente; sin embargo, el que Puebla se ubique en el lugar 29 a nivel nacional en cuanto a Producto Interno Bruto per cápita, reflejando el nivel de pobreza y pobreza extrema que habita en la entidad”, remarcó.
La relación que hace el politólogo entre la corrupción y el índice de pobreza se sustenta en los datos más recientes de Coneval, los cuales indican que en Puebla el 54 por ciento de la población vive en condición de pobreza, el 42.6 por ciento es pobreza moderada y 11.4 por ciento vive en pobreza extrema.
Sin embargo, el investigador remarcó que, aunque Puebla ocupa los últimos lugares de tasa de prevalencia de corrupción, es decir que la gente haya aceptado haber participado en actos de corrupción, la entidad aparece entre los primeros lugares en donde la gente se ha visto involucrada en mordidas u otros actos para agilizar algún proceso.
Cabe señalar que, entre los datos que resaltó el politólogo, está que el 55.3 por ciento de personas cree que la corrupción es un problema muy importante y la vinculan con el incremento de inseguridad y la delincuencia; en tanto, según el Inegi, las personas el 90.3 por ciento de las personas percibe que los partidos políticos son la entidad más corrupta, seguida de la Policía con 88.8 por ciento; diputados y senadores con 80.1 por ciento de percepción de corrupción, seguido del Ministerio Público y las Fiscalías.