Durante la Mañanera del Pueblo, la presidenta Claudia Sheinbaum descartó que se apliquen multas en primera instancia a las empresas ubicadas a lo largo de la cuenca del Alto Atoyac. La mandataria indicó que la prioridad será identificar los puntos de contaminación y construir un drenaje marginal para tratar las aguas negras.
La presidenta subrayó que el plan no se centra en penalizar a las empresas, sino en verificar que cumplan con la norma ambiental NOM-001, que exige el tratamiento adecuado de aguas residuales. Según Sheinbaum, el objetivo es garantizar que los desechos sean tratados a través de un drenaje marginal, donde las aguas negras pasen por una planta de tratamiento antes de regresar al río Atoyac.
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“El enfoque es más sobre prevención y tratamiento que sobre sanciones. Buscamos que las empresas cuenten con plantas de tratamiento de aguas y que cumplan con las regulaciones ambientales”, expresó la presidenta durante su conferencia desde el Palacio Nacional.
Sheinbaum destacó que personal de la PROFEPA (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) ya realiza recorridos por la cuenca para identificar las principales fuentes de contaminación. Esta acción se lleva a cabo en conjunto con los gobiernos federales, estatales y municipales, así como con la colaboración de empresarios.
La presidenta reafirmó que este esfuerzo de saneamiento será un trabajo colectivo, con la participación activa de las autoridades y sectores privados, con el objetivo de mejorar la calidad del agua y recuperar el equilibrio ecológico en la región.