Más allá de los discursos del “humanismo” y la “transformación” de los gobiernos de Morena en el estado, con total hegemonía política, lo importante serán los resultados para trascender.
En esencia, independientemente del color partidista, la clase política poblana es exactamente la misma.
Con pocas variantes, por los aliados de Morena como el PT, partidos como el Verde son otra vertiente del PRI, lo mismo que partidos de la “chiquillería” como el FxM, MC, PSI o PRD…
Han surgido, casi todos, del mismo tronco común que es el Partido Revolucionario Institucional, que gobernó México en 70 años ininterrumpidos, de los 76 al frente de la Presidencia de la República.
En el estado de Puebla, el PRI empezó con Rafael Ávila Camacho (1951-1957) a Mario Marín Torres, el último del PRI (2005-2011).
Puebla tuvo un total de 16 gobernadores priistas, cinco de los cuales llegaron como sustitutos y tres que se fueron por renuncias; son parte de la historia de los 95 años de un longevo priismo hoy prácticamente en extinción.
Los priistas poblanos, a partir del 2010, se escindieron de ese partido con la salida del grupo liderado por Rafael Moreno Valle, el extinto gobernador del periodo 2011-2017; Antonio Gali Fayad, 2017-2018 y Martha Érika Alonso (+), en Diciembre de 2018, bajo las siglas del PAN.
Los priistas empezaron a emigrar a Morena desde el 2016, otros antes, encabezados por Manuel Barttlet Díaz, un converso aliado del proyecto de la 4T de Andrés Manuel López Obrador.
Para la elección de gobernador en 2024, la mayoría de los ex priistas ya estaban afiliados a Morena, y los grupos morenovallistas -de origen priista casi todo- hicieron lo propio vía PVEM y con Morena, de manera directa.
El retorno de los priistas de cepa empezó en el gobierno del estado en el gobierno de transición encabezado por Guillermo Pacheco Pulido, un priista de la masonería poblana de pedigrí, a la muerte de Martha Érika.
Se trató de la antesala del retorno de los priistas (marinistas) que empezaron a colocarse en puntos estratégicos del gobierno del otro extinto gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta.
Uno de los ex priistas puros que retomó el control del poder político del estado fue Sergio Salomón Céspedes Peregrina, bajo las banderas de Morena, luego de incursionar en el PAN con el morenovallismo.
Fue entonces que los principales aspirantes a la candidatura de Morena en 2024 a la gubernatura fueran ex priistas como Alejandro Armenta Mier, Ignacio Mier Velazco, Julio Huerta, Olivia Salomón…
En el equipo de campaña de Armenta ya militaban en su causa ex priistas ligados a Mario Marín Torres, militantes de base, cuadros medios y altos, así como estrategas prominentes, que hoy ocupan posiciones clave en el gobierno de Morena de la Cuarta Transformación.
En esencia, en el gobierno cuatroté en Puebla de Morena, son exactamente los mismos priistas que han gobernado la entidad poblana desde Rafael Ávila Camacho, pasando por Mario Marín Torres.
Con Rafael Moreno Valle, escindido del PRI, que compitió bajo las siglas del PAN y se hizo de la gubernatura en 2010, como ocurrió con otro ex priista, Alejandro Armenta, que con las siglas de Morena se hizo de la gubernatura en 2024.
Se trata de la misma clase política priista, que bajo las siglas del PAN y Morena han gobernado el estado; son los mismos a quienes conoce muy bien la sociedad poblana, políticos que solo han cambiado de piel partidista, pero en esencia son los mismos que han gobernado la entidad.
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Morena de 4T: los mismos que han gobernado Puebla
