Los integrantes del Consejo de la Central de Abasto en Puebla alzaron la voz para exigir seguridad tras el asesinato de Norma, comerciante que murió en un asalto el pasado 11 de enero.

En rueda de prensa, denunciaron el aumento de la inseguridad dentro y fuera de la central. Se reportaron asaltos a clientes, robos a vehículos particulares y transportes de carga, además de saqueos de mercancía.

Luis Pinto Medel, líder del consejo, expresó el temor y hartazgo que sienten comerciantes, bodegueros y clientes. "Tenemos miedo de que esto siga empeorando", afirmó.

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Ante esta situación, pidieron una reunión urgente con el gobernador Alejandro Armenta Mier y el presidente municipal Pepe Chedraui Budib para coordinar acciones que garanticen seguridad.

El consejo también hizo un llamado a la fiscal general, Idamis Pastor Betancourt, solicitando avances en la investigación del asesinato. "Hemos proporcionado material, pero no vemos resultados", declaró Pinto Medel.

Advirtieron que, si no obtienen respuestas, organizarán una marcha el próximo miércoles 15 de enero para visibilizar su demanda de seguridad en la Central de Abasto y sus alrededores.

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