Con el endurecimiento de las leyes antiinmigrantes que impulsa el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, los casi tres millones de poblanos que radican en la unión americana corren el riesgo de ser deportados, afirmó Ricardo Andrade Cerezo, líder de la Fundación Pies Secos.
Sin embargo, el blanco principal serán quienes ingresaron el último año a través de caravanas y quienes presentan un historial delictivo, aunque “pensaron que así sería más fácil conseguir el asilo, pero las citas a las que aspiran serán hasta 2026 o 2027”, comentó en entrevista para 24 HORAS.
Aquellos migrantes con antecedentes penales serán puestos a disposición del departamento de Migración en automático, para saber si la persona tiene órdenes de aprehensión o de búsqueda.
En caso de comprobarse, serán entregados en los pasos fronterizos a los agentes de la fiscalías de la República o de los estados donde fueron denunciados.
“Debe haber algún caso de gente de Puebla que esté en situaciones extremas con la justicia, pero por lo general éstas se dan más con personas originarias de Zacatecas y Michoacán”, afirmó el líder de Pies Secos.
No obstante, Andrade Cerezo reconoció que la situación para los indocumentados en general es diferente, ya que armaron una estrategia para evitar ser detenidos.
“Puedo decirte que los mexicanos, no sólo los poblanos, se están cuidando mucho. Están echando a andar acciones preventivas para no ser deportados, cuidándose más al salir a la escuela, a la tienda, al trabajo, pero si los regresan su plan B es que alguien cercano que aún esté aquí pueda vender sus bienes como carros, muebles o casas, lo que tengan para que les envíen el dinero y puedan comenzar en nuestro país”, expresó.
Respecto al apoyo de las autoridades estatales para los repatriados, Andrade Cerezo comentó que ha tenido dos mesas de diálogo con el encargado de despacho del Instituto de Atención a los Poblanos en el Exterior, David Espinosa, para elaborar un programa de contingencia, desde la frontera hasta los municipios de origen.
“Algo que hemos estado gestionando con el Gobierno estatal es que se les apoye con certificaciones en algún oficio que hayan aprendido en Estados Unidos, para que puedan conseguir trabajo”, comentó Andrade Cerezo.
Ante este panorama, desestimó el nivel de alarma para los migrantes al iniciar el segundo mandato de Donald Trump ya que, en su primer periodo, el número de deportaciones fue más bajo, en comparación con las registradas durante las presidencias de de Barack Obama y Joe Biden, quienes no se pronunciaron contra los migrantes pero actuaron severamente.
“Esto que se viene no es nuevo, todos los días hay deportaciones. Esta administración de Biden rompió récord en deportaciones con más de 300 mil personas y de esas, más de 80 mil fueron mexicanos, entonces la llegada de Trump no va a cambiar la situación, la diferencia es que él lo menciona a cada rato y hace énfasis en quienes tienen antecedentes criminales”, finalizó el activista.